Riley: Gracias -dijo sonriéndole, pero de ver sus ojos, su vista se poso en sus labios. -Pero tú tienes la culpa - dijo susurrándole.
Brandon: ¿A sí? -y se iban acercando, de poco a poco- ¿Por qué?
Riley: Yo no quería tener novio -y se besaron
Brandon: Pero me dijiste que si -y otro beso
Riley: Si... -otro beso- Porque te amo. Brandon y Riley entre besos se dirigieron hacia la habitación, la acostó delicadamente en la cama, mientras su mano alzaba la blusa de Riley, y en un intento desesperado de sacarle la blusa, la rompió, y esto causo la risa de Riley, pero igual siguieron con lo suyo, Riley fijo su vista en los ojos de Brandon, y a la vez desabrochaba los botones de su camisa, uno por uno, cuando por fin logro sacarla, Brandon esta vez saco los jeans de ella, y así mutuamente se fueron desvistiendo, cuando los dos ya estaban desnudos, Riley empezó a temblar.
Brandon: Tranquila -dijo besándole el cuello, Riley ya estaba un tanto cegada por la excitación que sentía, pero esta se desvaneció cuando sintió un dolor, y apretó con sus manos la espalada de Brandon y hecho un ligera e inaudible risa.
Riley: Hubieras avisado ¿No?
Brandon: Perdona -suspiro cerca de su oído- ¿Te he lastimado?
Riley: Tú solo sigue - Y fue exactamente lo que Brandon hizo.
- [Narra Riley]
Brandon soltó un suspiro en mi oído, y me volvió a estremecer, me volvió besar hasta que nos separamos por falta de aire, Tomó mi labio inferior con ganas y lo mordió mientras lo succionaba, gemí en sus labios y con mis manos en su cuello lo apegué más a mí, sus manos vagaron a mi cadera, de mis labios salían suspiros y gemidos necesitados, él no dijo nada más y me besó los labios mientras poco a poco se iba introduciendo nuevamente dentro de mí y ambos largamos un gemido satisfactorio. Sus embestidas eran brutales y suaves a la vez, dentro y fuera era la sensación más placentera que tuve desde nunca, sentirlo era algo mágico, algo inerte que hacía que me asustara. Un hormigueo bajó mi espalda y empecé a suspirar cada vez más fuerte.
Riley: ¡Brandon! -grite. Me vine junto con él quien gritó mi nombre. Se desplomó contra mí y lo abracé, su cara quedó escondida en mi cuello, acaricié su espalda y di besos en su clavícula. Su respiración se hizo cada vez más lenta hasta que siguió a un ritmo natural, se había dormido. Yo me sentía cansada, había perdido mi virginidad, pero la había perdido con la persona que quería.
- [Fin de la narración]
Riley se despertó por las pequeñas caricias que le brindaba Brandon, el cual se despertó más temprano para poder contemplarla.
Riley: Mi padre una vez me dijo que él tenía una escopeta bien guardada para quien me tocara -susurró y el rio.
Brandon: ¿Cómo amaneciste?
Riley: Bien, genial de maravilla -dijo, y volteo hacia la ventana, hace unos años atrás ella no se imaginaba así, de hecho se imaginaba muerta, pero ya era suficiente de estarse lamentando cosas que ni al caso, tenía que salir adelante, tenía que olvidar, y a veces tienes esa horrible sensación de tener el pecho comprimido por una maldita situación que no logras sacar de tu mente y no tienes que amargarte la vida, y tampoco que veas el lado positivo de todo, porque cuando alguien muere a ese lado no le ves nada positivo, y Riley no se iba a amargar la vida solo porque sus papás no están.
