Capítulo 40 - ¿Cuál es tu historia?

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Olive: ¡Le toca a Ferananda! -Todas juntas preguntamos, "¿Verdad o reto?"... sí, sí, me acabaron dos horas antes, y desde entonces estamos jugando, me hacía olvidar un poco los nervios, aunque a cada momento estaba viendo el reloj.

Fernanda: Reto -Nos dimos una mirada cómplice, pero entonces Irlanda hablo.

Irlanda: ¡Yo tengo una! -Fernanda la miraba como queriéndola matar - En la fiesta de Riley, tiene que subirse a una mesa y decir un discurso sobre lo que hemos pasado juntas.

Riley: ¡Algo más emocionante, Irlanda! -Dije empujándola levemente.

Fernanda: No, no, no, ¡Eso está perfecto!

Seguimos jugando y jugando, hasta que llegó la hora, ¡Oh Dios! Me iba a casar en menos de una hora (La verdad es que pensé que moriría sola y con 40 gatos, pero bueno, el destino me jugo una buena broma)

-o-

Vi la iglesia por fuera, habían pasado 7 minutos, pero para mí pasaron como 7 días, Abraham estaba al lado mío, apoyándome.

Abraham: Tranquila Riley, si te sirve de consuelo, Brandon está peor que tu -Lo fulmine con la mirada.

Riley: Uy si, gracias por tu apoyo - ¿Sarcástica? ¿Dónde?

Abraham: Ya, tranquila, todo estará bien, ¿Okay?

Riley: Si... -suspire- Gracias.

Abraham: ¿Lista?

Riley: No -sentía las manos sudorosas y un cosquilleo en el estómago, pero era por nervios.

Abraham: Estás lista y punto, ahora, vamos. -Abrió la puerta del coche y me tendió una mano, que muy a regañadientes la tome.

Me guio hacia la puerta, en cuestión de segundos una música dramática ((era la típica música, solo estaba exagerando)) y al otro, ya estaba al lado de Brandon. Me sonrió, le sonreí. Y me enamore más de lo que ya estaba. Después, volví la mirada hacia el padre, y vi su boca, se movía y se movía, no escuchaba, solo se movía, y se movía, seguido de esto, sentí un apretón de manos, ¿Ah?

Padre/Orador/o lo que sea: Vuelvo a repetir, Señorita Riley Montelaire, está dispuesta a unir su vida con el joven Brandon Meza, para respetarlo, acompañarlo en las buenas, como en las malas... -me volví a perder, ¿Ya lo había dicho? ¿Ya se lo había preguntado a Brandon? ¿Qué dijo él? - ¿Acepta usted, ser esposa de Beandon Meza?

Riley: Si -Dije cuando volví a la realidad.

Padre/Orador: Por el poder que me otorga la iglesia, los declaro marido y mujer, puede besar a la novia -le indicó a Brandon.

Brandon jaló mi mano y puso su otra mano libre en mi nuca, profundizando el beso, mis manos estaban en su torso, y nos seguíamos besando, hasta que nuestros pulmones suplicaron por oxígeno.

Padre/Orador: En sus ojos se ve el amor, ustedes estarán juntos por mucho tiempo -Nos dijo a un lado de nosotros, yo sonreí feliz, completamente feliz.
Desearía que mis padres estuvieran aquí.

-o-

La fiesta era un total... desastre, pero del bueno, se veía bastante animada, recibí felicitaciones de gente a quien ni siquiera había visto, había bailado con personas a las cuales ni les pregunte su nombre y a estas alturas, todos estábamos sentados en el suelo, y algunos pasaban a decir algunas palabras, pero entonces, paso Fernanda... ah, el reto.

Fernanda: ¡Para empezar! -Joder, estaba borracha - Siendo sincera, yo siempre pensé que Riley iba a terminar sola -Ja, al menos no fui la única que pensó en aquello- Pero resulto que ella se casó primero y termino embarazada, por cierto, ¿Ya sabes lo que es? -Negué divertida- Ay, ¿Entonces como compran las cosas? -Me encogí de hombros, la verdad, no habíamos comprado ni un calcetín - Y solo puedo decirte, tanto a ti como a Brandon... Que espero que se hagan pasitas juntos -Y soltó una carcajada, después de un salto bajo de la mesa, me abrazo a mí y a Brandon, muy, muy fuerte.

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