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Una alarma empezo a sonar en el lugar y todos fueron con rapidez al córtex para que situación era la que habían encontrado y era que Magenta había ido al hospital para vengarse de su padre lanzando un barco gigante y hasta el momento la mejor opción que había era formar una hélice con su velocidad.

El único problema era que Barry no podía con esa situación por su cuenta, Donna se abstenía de morderse las uñas al ver la situación, preocupada por su sobrino y por Iris quien estaba dentro del hospital. Se giro al sentir una mirada sobre ella y sus ojos se toparon con los de Harry y ella asiente ligeramente a lo que ahora el hombre de gafas voltea a ver a Jesse y la envía con Barry para ayudarlo.

Al final salvaron el día y Barry llevo a Frankie a la base donde la dejo descansar un poco, mañana por la mañana hablarían con ella sobre alquimia y sobre su situación con sus nuevos poderes al igual de la buena notica. El nuevo hogar adoptivo que Caitlin y Donna lograron encontrarle con buenas personas que la cuidarían y le darían el amor que ella se merece y que no recibió antes.

Donna suspiraba mientras caminaba por el laboratorio de velocidad y se sentaba un momento en la entrada del tubo por donde los chicos corrían, se quito los tacones por un momento mientras se masajeaba un poco los pies, su trabajo le exigía tacones y aunque ya estaba acostumbrada a estos a veces sentía dolor.

Mientras se quitaba el dolor de sus pies, su mente divagaba al extraño suceso que había pasado en su laboratorio, si bien era cierto que su trabajo había explotado no era cierto que había sido por culpa de los rayos gamma como les había dicho a Harry y a Cisco, la verdadera razón era que una fuerza invisible y blanca destruyo su trabajo y dejo una nota bastante amenazadora de que si continuaba con la prisión de velocidad se iba a arrepentir, pero ella no era de las que se asustaban con una amenaza vacía y sin sentido de alguien cobarde y que no muestra su cara.

Ella continuara con su proyecto, porque esa era su manera de tratar de aliviar la culpa que sentía por no haber podido proteger a su familia, a su hermana, a Henry y a su sobrino, si ella hubiera hecho esa prisión antes tal vez hubieran podido encerrar a Zoom, a Flash Reverso, pero no había tiempo para lamentaciones, lo único que le quedaba era el futuro.

Y se aseguraría de que el futuro para Barry fuera brillante y que tuviera una manera de encerrar a otros velocistas de manera segura y permanente.

Harry caminaba hacia su habitación donde Jesse yacía dormida, la pobre había quedado agotada luego de tanto correr y de soportar el peso del barco que al llegar y poner su cabeza en la almohada había quedado atrapada en el mundo de los sueños.

Y él iba al mismo rumbo, pero se detuvo frente al laboratorio de velocidad al escuchar una voz hermosa y parecida a los estorninos, una voz que cantaba una canción de cuna rusa que él desconocía pero que se le hacía preciosa.

Lentamente se adentro al laboratorio de velocidad y se quedó ahí, recargado contra el metal de la entrada viendo a Donna sin zapatos sentada en la entrada del tubo de velocidad, con los ojos cerrados, el cabello cayéndole desordenadamente por el rostro y de sus labios salía esa maravillosa canción que lo había hechizado.

Belladonna| H.R. Wells vs Harry WellsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora