Sᴏᴜʟᴍᴀᴛᴇs | ˢᵗᵉʳᵉᵏ

ఌ︎ Cᴀᴘɪ́ᴛᴜʟᴏ 4 ఌ︎

𝑷𝒐𝒗 𝑺𝒕𝒊𝒍𝒆𝒔

Me encontraba en la escuela abriendo mi casillero; festejando internamente que ahora sí pude leer. Hasta que el sonido de un megáfono me hizo dar un brinco.

—La clase empieza dentro de cinco minutos. Solo porque no hay luz, no crean que no habrá clases.

No sé si era porque me tiene manía o simplemente de verdad me odiaba, pero cuando dijo las ultimas palabras acercó esa cosa a mi oído ocasionando que me retumbe un pitido en él.

—Eso fue un triple negativo. Muy impresionante, entrenador. —Le guiñé un ojo mientras sacaba unas últimas cosas de mi casillero.

—Entendido. —Me respondió con esa misma cosa.

Esbocé una sonrisa y negué despacio, cuando saqué el último libro el manojo de mis llaves cayó al suelo por lo que tuve que recogerlas y ahí vi nuevamente aquella llave— ¿De dónde habrás salido? —Me pregunté a mi mismo mirando dichosa llave, pero la puerta siendo abierta llamó mi atención viendo ahí a Scott parado, alcé mi mano para saludarlo cuando me di cuenta de que toda su atención estaba en Kira; quien simplemente se dio media vuelta alejándose.

Scott quería acercarse a ella, por lo que apenas pasó cerca de mí lo detuve posando mi mano en su pecho.

—No. Detente.

— ¿Qué? Quiero hablar con ella. —Se quejó el alfa

—No. Recuerda que le dejaron un mensaje a Barrow para que la matara.

—Por eso quiero hablar con ella. —Insistió Scott

—Scott, no lo harás. Hasta que averigüemos si ella es otro monstruo psicótico que comenzará a matar a todo el mundo, voto contra cualquier interacción. —Indiqué haciendo una seña con mis manos y brazos en forma de negación.

— ¿Y si ella es como yo? —Preguntó mi amigo observando como Kira se marchaba

—Esa chicha resistió 1,21 gigavatios de electricidad. No es como tú. —Dije bajando mi brazo derecho luego de haberla señalado, intentando hacer que el moreno me hiciera caso. Luego cerré el casillero y cuando Scott se alejó de mi observé nuevamente la llave algo dudoso; intentando recordar algo, pero nada.

Las clases pasaron rápido al igual que el tiempo, los síntomas eran los mismos de siempre, sueño, mareo y a veces veía al dichoso zorro; pero no por mucho tiempo. Cuando estuve por irme a mi casa, Scott llegó corriendo con Kira donde estaba yo, me explicó algo acelerado que teníamos que recuperar el móvil de Kira pues ahí había un secreto sobrenatural de ella; vaya sorpresa.

Ya en la noche esperé en mi jeep a Scott, de vez en cuando le echaba una mirada a la llave, pero ningún recuerdo sobre ella llegaba a mi mente asi que la deje a un lado. Scott llegó junto con Kira en la moto por lo que saqué unas tarjetas de ingreso para que pudieran entrar.

—Ok. Con esta abres todas las puertas del perímetro —Le extendí una tarjeta— Con esta, la sala de pruebas —Le pasé otra— Y con esta, la oficina de mi padre.

—No las robaste, ¿Verdad? —Preguntó Scott teniendo las tres tarjetas en sus manos.

—No. Las cloné con un emulador de RFID.

— ¿Es peor que robar?

—Es ser más listo… —Lo miré a los directamente a los ojos

—Scott, ¿puedo preguntarte algo? —Kira rompió aquella conexión alejándose un poco con Scott.

—De acuerdo, yo solo… —Rasqué un poco mi cabeza algo incomodo, estuvieron charlando un rato hasta que regresaron algo incómodos. O eso pude notar— Casi todos están pendientes del apagón ahora. Pero siempre hay alguien en la recepción. Hay uno o dos turnos por lo general. Usaran la puerta de servicio al lado de la basura. —Señalé donde se encontraba dichosa puerta, viendo como ellos miraban hacia esa dirección— ¿Bien? Nadie la usa. Te enviaré un mensaje si alguien sale. Pero si te atrapan, no puedo ayudarte. A mi padre lo investigan por una destitución por culpa de tu padre, así que si pasa algo, huiré y los daré por muertos. —Terminé de explicar moviendo mis dedos en la tarjeta que tenía en mis manos algo ansioso.