Sólo.. amemonos tal y como sabemos hacerlo.
"Vivamos juntos hoy y mañana
quiero ver tu dulce mirada
mi corazón siempre será tuyo
es una promesa
me enamoré de tí
te enamoraste de mi
eso jamás nadie podrá cambiarlo
ni aunque el cielo desaparezca maña...
Desperté por el sonido de mi alarma, iba apagarla cuando noté que estaba siendo rodeada por unos brazos. Giré mi cabeza con rápidez y logré ver a Soonyoung a mi lado.. abrazandome.
Apagué rápidamente la alarma y volví a la posición en la que estaba. Podía esuchar y sentir su suave y calmada respiración detrás de mi. Aunque lo haya visto por unos segundos, no puedo borrar de mi mente su rostro dormido, Se veía tan.. tranquilo.
De un momento a otro, mi tranquilidad fué interrumpida cuando recordé que él estaba allí, durmiendo a mi lado porque.. por que yo se lo pedí. LO LLAMÉ.. OPPA? Dios, dios, dios, TRAGAME TIERRA.
Me dí un golpe interno e hice un pequeño gesto de disgusto.
—No crees que es muy temprano como para estar enfadada, Minji?— Dios.. su voz somnolienta y ronca, su aliento detrás. Al parecer, mi pataleta de vergüenza lo había despertado. Escuché cómo bostezaba y se removía.
—Yo.. lo siento por lo de anoche, no sé en qué estaba pensando— Me disculpé con él, aunque aún me encontraba de espaldas. No escuché respuesta alguna, Tal vez no acepta mis disculpas? Dios mio....
Sus brazos me rodearon nuevamente, girandome y apegandome a él, abrazandome con gentileza. Aún algo sorprendida, correspondí al abrazo, pasando mi brazo timidamente hasta du espalda, acariciandola con mi mano. Sentí como su respiración volvía a ser suave. Me tenía apegada a él y yo no hacía nada. ¿Qué se supone que haría? No deseo alejarme y al parecer, tampoco le incómoda.
Me dejé llevar y terminé durmiendome por segunda vez, al igual que él. Me sentía muy cómoda entre sus brazos, me hacía sentir bien.
Pov Soonyoung.
Pasó un rato desde que volví a quedarme dormido. Me asusté un poco al ver la hora, llegaría tarde al trabajo. Me fijé bien y suspiré tranquilizandome al ver y recordar que hoy es sábado. Sinceramente, deberían darme vacaciones! Las merezco y he trabajado por ellas.
Tan pronto bajé mi mirada, pude ver a mi amiga, durmiendo con casi todo su rostro enterrado en mi pecho. Sonreí al recordar cómo me había llamado anoche, cuando pidió que la acompañara. Pasé mi mano por su cabello, dandole pequeñas caricias, sin borrar mi sonrisa. Se veía tan.. bella y tierna, realmente muy bonita.
Me quedé un rato más viendola. En la noche no dejó de moverse, mucho menos dejó de hablar. Llamaba y llamaba a un tal... ¿"Jae"? ¿"Joe"? jamás había escuchado que me hablara de alguien con un nombre así. Me causa curiosidad al respecto, ¿debería preguntarle? mejor no, ella estaba llorando.. no creo que sea correcto preguntarle.
Estaba sumido en mis pensamientos hasta que sentí cómo empezaba a removerse entre mis brazos, hasta quedarse sentada. Contuve una risa al ver sus ojos aún cerrados, mejillas hinchadas, por supuesto que seguía viendose linda, pero al verla casi al 90% dormida, era demasiado gracioso.
Pov. Minji
Apenas me senté, giré mi cabeza y ví al niño tigre observandome con mucha gracia, tomé un cojín y se lo aventé a la cara.
—Qué es tan gracioso, Kwon?— le pregunté frunciendo el ceño y al mismo tiempo, dando un casto bostezo. —Sabes lo apretable que te ves ahora mismo?— lo miré fijamente y me giré dandole la espalda para que no se viera mi sonrojo. —C-claro que no.. —
Discutimos un pequeño rato y luego de desayunar, se despidió, obviamente debía volver a su casa. Según lo que me contó, en un mes, su madre se iba de viaje, por lo que no lo vería muy seguido, ya que él es quien cuida a su hermana.
Subí a mi habitación y tomé una ducha, no tan larga, tengo dinero, pero no pienso pagar una cuenta tan alta por consumir mucha agua. Busqué algo de ropa, debo admitir que no me puse lo primero que encontré. Todos sabemos que esa es una de las mayores mentiras de la H I S T O R I A.
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Pasaron unas.. dos horas? no lo sé, me encontraba pintando. Uno de mis pasatiempos es la pintura, pero el bailar es lo que me relaja, aunque no he tenido mucho tiempo para hacerlo
Observé lo que estaba pintando, hace unos días que había comenzado esta pintura.
Cada vez que cerraba los ojos, no podía evitar pensar en él, ver su rostro, casi sentir que tocaba sus suaves manos. "Mi querido Jae.. aún te extraño.." Cerré mis ojos, recordando las veces en las que reíamos, cuando me abrazaba por detrás mientras pintaba. Todo de él, sigue en mi cuerpo y en mi mente.. No puedo olvidar a alguien que ya es parte de mi.
Me levanté, tomé mi bolso y una capucha negra. Es hora de ir a verlo. Conduje intentando contener las lágrimas, apenas llegué, me arrodillé frente a su tumba.
—Mi Jae, te extraño demasiado, en verdad te extraño mucho, porfavor, porfavor, vuelve— rogué y miré llena de lágrimas su foto.
"¿Por qué tuviste que irte? Prometiste que no me dejarías sola. Te haz ido, ya no siento tu presencia a mi lado. ¿Quién me arropará cuando sienta frío? ¿Quién besará mi mejilla cada vez que sonría? ¿Quién me abrazará cuando tenga miedo?"
Me senté en el suelo y seguí observando fíjamente su foto. "Nadie me amó como tú, nadie, jamás nadie lo hará".
Recuerdo perfectamente el día en que te conocí, tu bella sonrisa, tu bella mirada. ¿Me extrañarás? Acaricié su lápida, tenía su nombre escrito, la maldita fecha en que decidiste irte.. para salvarme..
Uhhhh, quién creen que será este nuevo personaje? 🕴
Comenten si les va gustando la historia!! estaré leyendo lo que digan en comentarios, no olviden votar. <3
