Capítulo 10: Laxus al rescate

143 11 0
                                    

Mientras Mira y Amber peleaban, Laxus despertó en la enfermería totalmente recuperado de la herida que le hizo la pelirroja. Entonces, el rubio salió del gremio y preguntó a su grupo donde estaban su abuelo, Mira y Amber.

-Las dos están luchando.-contestó Bickslow-Del Maestro no sabemos nada.

Laxus entonces salió corriendo en busca de Makarov y decirle a Mirajane algo muy importante.

Volviendo a la pelea, las dos se negaban a retroceder y aumentaron el nivel mágico. El hechizo de Amber superó al de Mira y la demonio albina salió volando varios metros. Amber fue hacia ella y le asestó un fuerte golpe que la tiró al agua. Amber se lanzó nuevamente y agarró a Mira del cuello dispuesta a ahogarla y matarla.

-No...no puedo respirar-pensaba Mirajane-Te...tengo que librarme de ella.

Un hechizo de la albina alcanzó a Amber y ésta la soltó. Mirajane salió rápidamente a la superficie y trató de volar, pero sus alas estaban mojadas y así no podía pelear. Amber salió minutos después y trató de ahogar a Mira, pero ella se defendió y golpeó a Amber muy fuerte, haciendo que la pelirroja chillase de dolor.

-¡Acabaré contigo de una vez!-gritaba Amber rabiosa-Ya me da igual Laxus, ¡voy a acabar contigo!

Amber cogió a Mirajane y alzó el vuelo. La monstruo pelirroja empezó a girar en el aire para marear a Mirajane y dejarla inconsciente antes de lanzarla nuevamente al mar y que muera ahogada, pero Mirajane no iba a permitirlo; agarró a Amber de un brazo e hizo lo mismo. Mirajane lanzó un ataque mágico a la cara de Amber y la lanzó a una pequeña isla deshabitada.

-¡Esto se acabó!-gritó Mira mientras preparaba un ataque.

Amber trataba de moverse, pero ese último golpe la dejó muy malherida y no pudo. Mirajane se lanzó hacia ella con el ataque cargado y atacó con todas sus fuerzas a Amber, generando una gran explosión y una gran nube de polvo. Toda la isla se agitó con el ataque y las olas del mar retumbaron por la costa. Cuando la gran nube de polvo se disipó, podemos ver un gran boquete con Amber tirada en el suelo y Mira de pie respirando muy agitada, se iba a desmayar en cualquier momento. Amber hizo un enorme esfuerzo por levantarse y lo consiguió, pero ella había recibido mucho daño y se tambaleaba.

-Esto no ha acabado-decía señalando a Mira-Yo aún puedo pelear, que pena que tú no puedas continuar, ese último ataque gastó toda tu magia, has perdido, zorra albina.

Amber golpeó a Mira en la cara y la maga de Fairy Tail se negó a caer por lo que ella respondió de la misma manera, dando un fuerte puñetazo a Amber en la cara. La pelirroja retrocedió por el dolor, pero continuó golpeando a Mirajane. La albina se negaba a caer y miraba con rabia a Amber.

-¿Por qué?-preguntó Amber desesperada-¿Por qué no caes? ¿Qué te mueve a que sigas de pie?

-Los magos de Fairy Tail no caeremos ante nuestros enemigos. Aparte, yo no puedo permitir que te quedes con la persona que amo.

Amber, desesperada seguía golpeando a Mira, pero el resultado era el mismo aún cuando a Mira le flaqueaban las piernas.

-¡Maldita sea!-gritaba Amber-¡Cae, cae, cae! ¡Te odio, te odio. te odio!

La pelirroja fue a dar un último golpe cuando una mano se interpuso y paró el golpe. Cuando Amber abrió los ojos, vio que Laxus estaba frente a ella mirándola rabioso.

-¡Mierda!-pensó Amber-¿Por qué tuvo que venir precisamente él?

Laxus tiró a Amber a un lado y ella estaba asustada, en su estado no podría pelear contra alguien que está rebosante de magia.

-¡Laxus! Que bien que hayas venido, estoy muy arrepentida por lo que he hecho. He hecho mal al meterme con Fairy Tail. Deja que me vaya, por favor.

-Has osado atacar a mi familia, hasta a tu propia hermana. Amber, eres una persona despreciable.

-¡Lo siento mucho!-sollozaba Amber-Por favor, perdóname. Prometo no volver a acercarme a tu gremio, perdóname.

-Tus súplicas no servirán de nada-dijo Laxus-Pero, vamos a hacer una prueba.

El rubio hizo una pose y colocó sus manos para realizar un hechizo, el Fairy Law.

-Si aguantas este hechizo, demostrarás ser digna de nuestro perdón, pero si te desmayas, no eres digna y no serás perdonada.

-¡No, por favor!-gritó la pelirroja-¡No quiero hacer eso! ¡Perdóname! ¡LAXUS!

-Fairy Law-conjuró Laxus y una luz cegadora inundó la isla.

Cuando el hechizo terminó, Amber quedó inconsciente y cayó al suelo.

-Como pensaba, no eres digna. Esto se ha acabado, Amber.

Mirajane miró a Laxus y sonriendo, cayó inconsciente a los brazos del rubio.

-Lo has muy bien Mira, has aguantado bastante estando tan debilitada. Volvamos al gremio.


No me gusta ser tu amiga asíDonde viven las historias. Descúbrelo ahora