[2: 14 de debrero]

438 44 4
                                    



¡¿Qué había dicho!? ¡¿Yo!?

No no no no no.

«Descuida Kook, habla de otro chico quien extrañamente tiene el mismo nombre, apellido y que también va en la misma clase, seguro sólo fuiste despistado al no notarlo» me dijo una voz en mi cabeza para tranquilizar mis nervios.

Si. Eso era.
No tenía de que preocuparme.

¡Jeon!se escuchó a mis espaldas¡Amor! ¡Déjame ayudarte con eso!exclamó quitando la mitad del peso que llevaba cargando.

Yo sólo me dispuse a mirarlo inexpresivo. ¡¿Amor!? ¡¿Cómo es que había llegado a formar parte de algo así!? "Yo" la persona que siempre había tratado de evadir las incómodas situaciones que el amor aporta. ¡Esto no podía estar pasándome! ¡NO PODÍA DEJAR QUE PASARA! ¡Me oponía!
¡Me negaba rotundamente!

Disculpame aclaré la garganta que ahora se encontraba secaPero yo no...

¡Ay que tierno eres!me interrumpió poniéndose de puntitas para darle palmaditas a mi cabeza despeinándome y yo no terminaba de comprender su actitud hacia mi persona.

Aquel rubio volteaba una y otra vez para ver la reacción de su (quien sea que fuese aquel con el que estaba discutiendo) y eso a mi solo me ponía más incómodo, más nervioso, más ansioso. Así que sin esperar más "escenitas" como esas por parte suya, decidí ignorar lo sucedido y caminar lo más rápido posible hacia la sala de profesores como intento de perderlos a ambos, y fallando vilmente en ese intento.
Maldije miles de veces por lo bajo al notar que el chico estaba siguiéndome con descaro, es decir, ni siquiera se le notaba avergonzado o tímido.

Graciasmencionó igualando mis pasosPor no delatarme frente a él, hubiese sido muy humillante.

Humillados se sentían mis principios.
En realidad mi objetivo principal si era exponer su ridícula mentira, pero el me había interrumpido, ¿Por qué me agradecía entonces?

In Guk es mi novio, bueno, ahora ex novioexplicó y yo lo miré confundido, quiero decir, no había preguntado, había cero necesidad de darme una explicación

Como sea, conocía a aquel nombrado. Ambos formábamos parte del equipo de fútbol de la escuela, pero fuera del el, no teníamos ningún tipo de relación. Era detestable ese ser humano.

Supongo que lo menos que puedo hacer es decírtelo.

Entiendome limité a contestar indiferente.

Es un completo tonto, le he dado cientos de oportunidades y no las toma enserio, no sé cómo logré soportarlo todo hasta el día de hoyespetó dejando mi mente completamente en blanco, literalmente estaba contándole sus problemas a un completo extrañoSólo, quiere volver porque en dos días es 14 de febrero.

Con qué eso era.
14 de febrero, lo había olvidado por completo.

Una de las fechas que más odiaba en el mundo, un día donde la simple acción de caminar te resulta imposible de realizar al encontrarte rodeado de parejas y más clichés, día donde van al cine, ya que las personas no tienen más imaginación y su cita ideal es ir a ver una película, en donde por cierto, nunca pueden conversar; invertir días enteros creando la carta de amor más original, larga y bíblica que jamás se haya creado en la historia, para que al siguiente día termine guardada en el cajón de ropa interior de tu chico, o quizá en el bote de basura, tal vez en manos de tu madre, quien se emociona al saber que su hijo es todo un galán, o qué un obsesionado te ponga una manta declarándole al mundo que te ama. Un clásico.

Lo único que podía esperar para mi 14 de febrero era una etiqueta en facebook de mi familia junto con otras doscientas personas de la que ni idea tenia que existían o tíos que viven a kilómetros de mi, chutarme la radio en la estación llamada "sólo música romántica" y escuchar a treinta personas quejarse sobre el día de San Valentín con el único pretexto de que "es un día hecho para la mercadotecnia". Como si yo aún no lo supiera.

Y luego de tener aquel monólogo conmigo mismo, pero antes de que lo pudiese notar, ya estaba frente a la oficina.

—Gracias por la ayuda que no solicité—respondí serio—Yo me encargó a partir de ahora—dije quitándole el resto de cuadernos que el me quito en primer lugar, sin mi permiso, cabe recalcar—Si me disculpas.

—¡Espera!—levantó la voz haciéndome sobresaltar un poco, y cuando sentí, ya tenía su mano sobre mi hombro derecho—¿Me pasas tú número?

¿Qué?

—¿Por qué te daría mi número?—le cuestioné volteando a mirarle  incrédulo.

—Bueno, yo, no sé, tal vez algún día llegué a necesitarte, ¿Podrías ayudarme?. Escucha sé que...

No puede ser ¿Enserio?
Son años los que no habíamos hablado pese a estudiar en el mismo lugar, mismo salón, desde que la preparatoria había iniciado, y ahora de la nada quería una amistad.

—Dame—le interrumpí extendiendo mi mano para impedir que siguiera hablando, comenzaba a sentirme fastidiado con todo esto de la relación falsa.

El me tendió su celular y yo con toda la calma del mundo le anoté el mío.

—Sólo para emergencias ¿Entendido?—recalque con seriedad—Ahora por favor, déjame entrar, enserio debo entregar esto.

Solté señalando con la mirada aquella pila de libretas que comenzaban a adormecer mis brazos.

—Bien, disculpa—me respondió sonriendo.

¿Qué tan malo podría ser?

ALT-er LOVE Donde viven las historias. Descúbrelo ahora