La oscuridad de la noche era callada a la una de la mañana en la cama de harry, tan callada que no había nada que lo sacará de sus pensamientos. Y aquel beso apresurado y húmedo, lo había dejado en el limbo, o no en el limbo exactamente; en un lugar lejano en su mente, donde tenia toda clase de pensamientos sobre el chico rubio que no salia de su cabeza.
Su cuerpo empezaba a sentirse raro ante sus pensamientos ruidosos... la situación incomoda de la sala de cambio, su toque, su delicadeza lenta y impacientante, y su rudeza firme y precisa...
Probablemente el ya lo ha hecho muchas veces... El sabe como hacer esas cosas... Pensaba en silencio el pelinegro, sintiendo la urgencia de saber, como es que el rubio se ve en esas situaciones, como es que se moverían esas manos frías por su cuerpo caliente, esos brazos grandes para obligar a sus caderas a chocar contra el, sus besos y el movimiento constante de estos por todo su cuerpo, el problema en su pantalón siendo deborado por el mientras sus piernas le daban la bienvenida a su paraíso. Como se vería draco en un acto tan obsceno?, alguien tan correcto, a veces malicioso, pero jamas la clase de persona que se deja ver en ese estado... Sus suspiros, su saliva, y sus músculos colapsando por el trabajo duro que conlleva satisfacerlo, quería todo para el.
Pensando en todo lo que paso por su mente en la sala de cambio de la playa, al pelinegro deslizaba sus manos por debajo de su ropa, imaginando como es que draco lo haría, cada vez mas ansioso de ser devorado por el.
Esos dientes clavándose en su piel, sin tiempo suficiente para respirar entre cada movimiento del rubio entrando en esa zona, tomando sus caderas en sus manos azotandolo contra su entrepierna y hundiendo todo lo suyo en el.
Harry no podía evitar tocarse, al sentir su cuerpo temblando de solo imaginar al rubio tomando lo que era suyo, lo imaginaba entre sus piernas mientras terminaba de sacarse la ropa interior, y cubría su boca para evitar el ruido vergonzoso que su comportamiento provocaba. Draco rozando su miembro obligando al pelinegro a abrir sus piernas para darle paso a su cuerpo de ponerse encima de el, harry sintiendo su espalda voluminosa con sus dedos, su expresión de cazador acechando atentamente a su presa, saboreando su comida antes de lamer la sangre de su cuerpo y despedazarlo con sus dientes.
Harry apretaba sus ojos tratando de controlar sus emociones. ya no sabía si su imaginación estaba jugando con el o si realmente se sentiría asi de bien tener al rubio apretando su carne mientras el frotaba su punzante problema. Pues frente a harry tocándose se posaba draco quitándose la camiseta.
-mhn... draco - susurraba el pelinegro sintiendo sus piernas temblando ligeramente, mientras draco se deshacía de toda su ropa, y con sus manos groseras tocaba todo lo que quisiera, moviendo al peligro como si fuera un trapo, estrujando las zonas menos apropiadas de Harry, haciéndolo reacciónar violentamente, arqueando su espalda con las piernas abiertas, tocando su interior suavemente, para sin avisar comenzar a ser descarado con sus dedos. Dejando a harry agotado, pero con ganas de mas
- draco... Lo quiero mmn-ah ahora...- decia harry dándole ordenes a su vivida alucinacion. mientras metía sus propios dedos imaginando como draco lo jalaba hacia el, haciéndolo suspirar profundamente al encontrar ese punto exacto y terminar de golpe.
Poco después el pelinegro cayo dormido ante su arduo esfuerzo por terminar con su problema. Y en su mente algo nuevo surgió, un deseo insaciable por aquel chico, una necesidad que jamas habia sentido. Quería pertenecer a el, aunque fuera por un segundo.
Bueno se me seco el cerebro asi que escribiré mañana gracias por leer jsjjsjs ( ◜‿◝ )♡
{Capitulo editado}
Ya me wa ir a dormir perros, buenas noches y disfruten su setso skskksks gracias por leer bye.

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serpientes
ФанфикA finales del sexto año del trio de oro, como metodo de investigación, Hermione propone una apuesta a sus amigos a cambio de una recompensa irresistible. Una apuesta en la que se vera involucrado Draco, sus amigos y todo aquello de lo que las serpie...