¿Habías escuchado alguna vez de las personas que brillan?
No brillan porque así lo quieren, es porque son necesarios en cierta forma, están ahí para levantarte, para hacerte sentir que todo es posible aunque en su interior se desate un infierno oculto.
De alguna manera siempre fuí un banco, así me hicieron sentir. Como esos del parque donde te sientas a pensar y una vez logras aclararte, te levantas largandote de ahí, el banco queda vacío pero al mismo tiempo lleno de todos los pensamientos y dudas que dejaste tirados en él.
Yo era el banco.
Entonces me apagué, dejé de brillar, dejé de esforzarme, ya no era necesaria para nadie, ni para mi misma, así lo sentía yo, así es como lo pensé.
Era fácilmente reemplazable.
Tú en cambio... Te apagaste hace tiempo, te cansaste de brillar para los demás ¿No es así? Yo nunca fuí lo suficientemente valiente para eso, tú en cambio arrazaste con todo en mi, llegaste defendiendo mis ideas, mis locuras.
Aceptaste lo que yo aún no había comprendido en mi misma, y lo cuidaste, ¿Por qué? La gente no es buena solo porque sí, el mundo está muy dañado y quedan pocos así, no pensé toparme con alguien como tú en mucho tiempo.
Supuse que debía agradecer, digo ¿Quién no estaría agradecida luego de que me hayas tratado tan bien? Pensé que iba a despedirme, ya no intentaba hacer que las personas se quedaran conmigo, ya no rogaba más amor, hace tanto que anhelaba eso que tu me diste... ¿Cómo le dicen? Ah si《Cariño》 Que palabra más agradable ¿no?
Pero... Sucedió lo que no pensé volvería a pasar.
No quise despedirme, no quise dejarte, no quería, no es lo que yo deseaba. Fué egoísta desde mi punto de vista ¿No crees? Quería tu atención, quería tu cariño, tus palabras, quería todo de ti.
¿Por qué te gusto? ¿No ves que soy un desastre?
Me gustas.
Me gustas como no me gustó nadie, me gustas como no me gustaba yo hace años, haces que me ame, haces que te ame, te amo ¿No es loco? Te amo y yo me había abstenido a amar hasta mi sombra.
Me gustas.
Me gusta como levantas la ceja al escuchar mis malos chistes.
Me gusta como ruedas los ojos cuando te hago berrinche.
Me gusta lo que haces, como sonríes.
Me gusta que seas tú quien me guste.
