𝗘𝗻𝗱 𝘁𝗵𝗲 𝗹𝗶𝗲 | 𝗛𝗮𝗻𝗴𝗲 𝗭𝗼𝗲 (EDITANDO)

04

Despertaste al sentir las manos de Hange tocando tus mejillas con delicadeza. Sus ojos te miraban fijamente guardando cada pequeño detalle de tu rostro. Sentiste el sonrojo en tus mejillas pues su mirada no era algo que aguantaras sin tomar ese color.

— Quisiera verte así cada mañana, te vez tan linda y tonta al querer ocultarlo de mi. —apretó tus mejillas riendo.

— Por dios Hange no pensé que fueras tan cursi por las mañanas. — 'En realidad me gusta', trataste de salir de la cama pero fuiste rodeada por sus brazos.

— ¿Te parece que solo diga eso de noche? — pregunto atrevidamente. — De esa manera también podre ver tu cara sonrojada no solo por ver mi rostro.

— Debería ir a cambiarme de ropa ya es tarde. — te levantaste de la cama y fuiste rápidamente al baño para esconder tu rostro con total impresión por sus palabras.

'Hange vas a hacer que termine yo sola lo que dejamos a medias'.

— ¿Te gustaría ir a ver el nuevo proyecto en el que estuve trabajando con Moblit? — hablo al otro lado de la puerta.

— Claro, solo iré a mi habitación y te veo frente al edificio. — respondiste saliendo del baño.

— Nos vemos en un rato entonces linda. — dijo viéndote salir de la habitación.

Mientras regresabas pensabas en todo lo que pudo haber pasado si no hubiera llegado la encargada.

Al salir del cuarto lograste ver a lo lejos a Yelena mirando cada número de las puertas. La velocidad de tus pasos aumento esperando no ser lo que pensabas, estabas por girar la manija de la habitación cuando la escuchaste hablarte, cosa que pretendiste no escuchar pero antes de entrar te tomo del hombro con fuerza haciendo que quedaras contra la puerta.

— Tratas de evitarme luego de que la pasamos bien estas semanas, ¿Dime de donde vienes? — aumento la fuerza en su agarre.

— No es algo que deba importarle, estamos fuera del horario de clases profesora. — dijiste en un tono molesto.

— ¿Eso crees pequeña? — rodeo tu cuello con su mano, su cara quedo lo suficientemente cerca que sus labios terminaron rosando los tuyos.

— Podría solo decir que es lo que quiere, no querrá que nos vean, una profesora frente la habitación de una alumna y de esta manera no es bueno para ambas. — lograste que se alejara al decir eso.

— Quiero que vengas conmigo, tengo que visitar un lugar pero no es de mi agrado ir sola, además no puedes negarte a lo que diga así que cámbiate y sal rápido estaré esperándote. — comenzó a caminar sin dejar respondieras algo.

— Mierda, si tan solo no sintiera miedo para poder hacer algo, te juro que estarías en problemas.

Te cambiaste de ropa y tomaste tu celular para mandarle un mensaje a Armin. No era una opción ir a la habitación de Hange, si tardabas Yelena iría a buscarte y todo pasaría a ser un caos en esa situación.

Tú: Armin si Hange te busca y pregunta sobre mi, dile que tuve que atender algo que olvide.

Saliste de la habitación esperando que el mensaje fuera leído. Al estar fuera buscaste con la mirada a Yelena, estaba agitando su mano desde su auto, sabias desde un inicio que no seria para nada bueno ir con ella fuera de la escuela, trataste de mantenerte pensando en que solo quisiera ir a un lugar tranquilo, pero era muy difícil mantenerlo en tu cabeza recordando su actitud.

— Entra pequeña. — dijo sin quitar la mirada del frente.

— ¿Me dirá a dónde vamos y porqué no quiere ir sola?