Capítulo 3: Por un dia mejor

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Aún seguía en el Río Norte del pueblo de Noland contemplando a Ivo haciendo movimientos circulares con su espada de cobre frente a un Dylan sin camisa y estaba chocándose los puños mientras fijaba la vista hacia él.

"¿Qué esperas? ¡Sal y pelea como hombre!" Dylan le gritó enfurecido. Yo me quede mirando a los dos.

Ivo apuntó su espada al frente de su cuerpo y Dylan subió los brazos para enseñar sus brazos como los boxeadores. Después de tomar sus posiciones Ivo dio una vuelta veloz y completa con su espada como un artista marcial profesional mientras que él hizo movimientos circulares con sus manos en forma de ruedas; algo que me llamó la atención porque era la primera vez que lo he visto hacer eso y lo vi como algo ridículo porque creí que lo estaba haciendo de broma. Pero resulta que era todo lo contrario: sus manos y sus ojos crearon un brillo azul claro que iluminaba todo el lugar como lámparas; entonces pensé que Dylan tenía superpoderes o algo así por el estilo porque con esa luz en todo su cuerpo lo hacía ver como si un dios griego está en su proceso de trascendencia.

Mire al cielo y vi que las nubes empezaron a ponerse más grandes y negras como si una tormenta se avecinaba hacia aquí. Luego de eso aparecieron millones de truenos blancos que daban impacto en las aguas de el río, causando que se suba la marea y se moviera de izquierda a derecha para formar enormes olas que parecían a las de un tsunami. Bajé la vista al frente y vi a Ivo reaccionar de una manera tan asombrada que bajó la espada en medio de su cuerpo para ver los poderes de su contrincante. "Pero, ¿qué estoy viendo?" dije atónito cuando Dylan comenzó a levitar en el aire con sus manos en los lados brillando cada vez más fuerte cuando sus poderes aumentaban.

"Ahora ¿tienes miedo de pelear conmigo?" Dylan gruñó en el momento en que la ola de tsunami se elevó detrás de él; Ivo guardó silencio.

Y justo cuando el Sr. Monet (así es como lo llamo a veces) vino volando hacía él percibí a su grupo salir de su escondite que se encontraban detrás de las casas de madera tapadas por los arbustos pasando corriendo detrás de mí ignorando el hecho de que seguía aún arrodillado por las órdenes que Ivo me hizo, mirando la pelea de Ivo contra uno de los amigos cercanos de mi padre. El grupo, sabiendo que su rival estaba a punto de romper una pelea con ellos, volvieron a sacar sus espadas de metal y tomaron diferentes posiciones según cómo debían de actuar ante esto. "Ustedes ya saben qué hacer ¡preparen sus cosas!" Ivo les ordenó a gritos. Los soldados hicieron diferentes movimientos con sus armas para resaltar las posiciones de guerra que ellos solían destacar e Ivo apuntó su espada hacia Dylan.

No sé que decir en cuanto a este evento: ver al padre de Philip por primera vez usando poderes inusuales que lo hacen manipular cualquier cosa relacionada con el agua o algo así por el estilo es como si estuviera alucinando algo que mi mente solo ve por sí misma; parecía un sueño lúcido. De repente Ivo se dio la vuelta para gritar algunas palabras que jamás entendí que significaba hacia cada uno de ellos y luego regresó a su posición listo para luchar contra él; Dylan por su parte alzó sus brazos y la ola creció más para después inclinarse encima de su cabeza."Paratus gladii!" Ivo exclamó. Los soldados subieron sus armas hacia Dylan y un silencio mudo rodeó el lugar por un momento hasta que gritó a todo pulmón.

"Impetum!" (significa en latín "¡Ataquen!)

Y todos lanzaron un grito de batalla frente a él; pero gritaban tan fuerte que pensé en la gente del pueblo despertándose ante el escándalo que estaban haciendo aquí desde sus casas. Tras el ruido tuve que retroceder de donde yo estaba hacia la esquina izquierda de la entrada del muelle cubriéndome los oídos para evitar escuchar sus terribles gritos (oírlos claramente sonaba más como lastimosos que los que normalmente escuchamos todos los días) contemplando a los soldados y Dylan atacándose entre ellos con lo que único que cargan. Mientras Ivo y compañía portaban solo sus espadas, Dylan por su parte comenzó a manipular la gigantesca ola de agua usando la agilidad de sus manos y piernas como si tuviera el control total de ella, pero al ver que uno de los soldados intentó abalanzarse encima de él echó el brazo hacia atrás para dar impulso y le arreó un fuerte puñetazo por la cara.

Elementaria 1: La Última LlamaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora