Los cerdos y la mierda en el retrete

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Había una vez, un grupo de cerdos que compartían un cobertizo. Allí, los cuatro cerditos vivían en paz. Tenían buena comida, cómodas camas y podían divertirse jugando cada día.

Estos cerditos no eran "puercos" y lo digo en sentido figurado pues; aunque los cerdos suelen ser muy "puercos"ellos no lo eran; tomaban baños diarios, cepillaban sus dientes, limpiaban la basura, hacían sus camas y lavaban sus ropas incluso, limpiaban sus heces y orinas.

Todo siempre fue así, muy limpio y agradable. Hasta que... un día, apareció una mierda en el retrete. Algún cerdito se olvidó de limpiarlo, ¿acaso se volvió literalmente un "puerco"?, ¿tal vez ya no podía limpiar?, ¿quizás enfermó y no podía hacerlo por sus propios medios?¿tal vez creyó que lo hizo pero en realidad solo pensó hacerlo?, ¿quizás estaba cansado, o acongojado? en fin, pueden ser múltiples y diversas las causas de que esto pasara, pero, lo que si era seguro era que había una mierda en el retrete y que algún cerdo era el culpable.

Entonces todo cambio. Inicialmente los cerditos se miraban con sospecha, cada día con más intriga y desconfianza. Algún cerdo había manchado la pureza de su cobertizo; ya nada volvería a ser igual, pues, algún cerdo lo había arruinado todo. Los cerdos ya no querían jugar más juntos incluso, indignados no quisieron volver a hacer sus camas, no volvieron a lavar sus ropas, no cepillaron más sus dientes y, especialmente no volvieron a limpiar sus heces y orinas. Fue así como una mierda en el retrete los llevo a todos a convertirse en verdaderos "puercos".

La culpa fue de algún cerdo que dejo su mierda en el retrete, ¡sí tan solo no hubiera sido tan "puerco"!. La culpa fue de algún cerdo que halló la mierda en el retrete. La culpa fue de algún cerdo que comento que había una mierda en el retrete después de limpiarla para alimentar su ego y enorgullecerse de lo generoso que era al limpiar la mierda de un "puerco" que presuntamente no era él. Pero, sobre todo, la culpa fue de algún cerdo que siempre limpio la mierda de los otros sin decir nada, que les hizo creer que efectivamente eran cerdos y no "puercos" y que los llevo a romper la armonía en el cobertizo en el momento que quien descubrió la mierda no fue él, sino, algún "puerco" que se hace llamar cerdo.

Fin.

Los Pesares De Un MiserableDonde viven las historias. Descúbrelo ahora