Rivendel

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Narración: Thorin

Cuando el amanecer se alzó sobre el cielo cubierto de nubes grisáceas y de una pálida y fría Luz que impacto sobre el suelo verde y escabroso.
Escuchamos a lo lejos los rugidos y los gritos de los Orcos desesperados por encontrarnos el rastro.

Ese tal Radagast, seguía dando de vueltas por toda la explanada con el objetivo de despistar a aquellas bestias dispuestas a asesinarnos.

—Por aquí —informó Gandalf en un susurró, y con sus manos indicó un lejano camino que se aproximaban a una roca enorme para poder ocultarnos.
Pero al mismo tiempo, en la lejanía, se veían las torres erguidas de los palacios plateados de Rivendel.
Quizá solo fue mi imaginación, pero sin duda, ya me sospechaba el plan de Gandalf al guiarnos por aquel camino.

—¿Adónde nos llevas? —pregunte enseguida, siguiendo el rastro de los chicos que corrían apresurados a ocultarse tras la roca.
Al no recibir respuesta, esboce una mirada salvaje y me volví para percatarme que había un Orco muy cerca de nosotros.

Aterricé en aquella roca e inspeccione a __(t/n), la última vez que estuvimos frente a los Huargos y el seguimientos de los orcos, ella había caído en una de sus visiones.

Ahora apunte mi mirada a él arco de Kili, dándole la orden de que disparará.
Sin decir palabra alguna, Kili reconoció la petición. Sigilosamente y con la mirada fija en su objetivo, se apresuró a poner una flecha sobre el cordel del arco y apunto lo más rápido posible.

Después de un ligera advertencia del Orco. Este cayó al suelo muy cerca de nosotros, pero antes de que pudiera gritar le corté el cuello en dos.
—Andando —ordene una vez con voz silbante.

Al aproximarnos a una de las Extremadura en dirección al bosque.
Más Orcos aparecieron frente al camino.

—¡Nos rodearon! —gritó Fili con evidente preocupación.
Pocos de nosotros estábamos armados, y también pocos de nosotros eran los más capaces de enfrentarse a un grupo tan numeroso.
—¡Vienen más! —ahora Kili dió la advertencia, a solo unos pasos de un par de orcos montados en Huargos que se aproximaban atacarlo.

—¿Y Gandalf? —preguntó Dwalin interrumpiendo mis pensamientos, quienes seguían formulando un posible plan de escape.
—¿Donde está Gandalf? —Volvio a preguntar Dori, con la necesidad de que el mago apareciera. Posiblemente con un hechizo para espantarlos.
—Nos abandono —Dwalin apretó el hacha en sus manos e hizo la guardia junto a mi.
Y __(t/n) a solo unos metros de mí, protegía de aquel pequeño hobbit que contemplaba el panorama con un susto totalmente transparente en sus ojos castaños.
—¡No retrocedan! —saque la espada de elfo.
Debo admitir que si era muy buena espada. Ligera y brillaba a la luz del sol pálido.
—¡Thorin! —escuche la voz de Bilbo.

Gire en su dirección con esperanza de verlo en las fauces de un Huargo, peor en cambio, mire como __(t/n) cayó rendida al suelo, con las manos en la cabeza y su espada en el suelo.
Estaba desprotegida, y dudo en verdad que ese hobbit sea capaz de protegerse a él mismo y a la chica al mismo tiempo.
No podía permitir que algo malo le pase.
—¡Por aquí estúpidos! —Gandalf se hizo escuchar a la distancia.
Y señaló una salida en el precipicio de una roca.
—¡Vamos! —ordene a todos.

Algunos por su parte llegaron primero, y otros tenían que matar a uno que otro Orco para poder seguir con el camino y arrojarse a aquella cavidad oscura detrás de la roca.
Me acerque a __(t/n) y a Bilbo.
—Anda, ve con los demás —mire al hobbit con afán de apresurarlo y enseguida tomé a __(t/n). Apoyo su brazo sobre mis hombros y corrió a mi lado, aún débil y agotada.

"¿Que le pudo haber pasado?"

—¡Cuidado! —gritó Kili dando un flechazo a nuestra dirección.
Su intención fue esquivar aquella flecha de Orco que volaba veloz hacia nosotros, pero fue en vano.

MY SHIELD: Thorin Oakenshield Fanfic.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora