Capitulo 12

9.8K 438 12
                                    

#Narrador en tercera persona#

Elena sale del instituto ya que tiene una hora libre y se dirige al cementerio.

Pasa por la tumba de Sara y se coloca en la de al lado, la de su madre.

A su madre la mato un cáncer hace unos meses, por eso comprende a Marina.

Se fija en la tumba mejor, esta llena de sangre.

-Oh Dios mío dime que no lo ha echo.-susurra.- No puede hacerlo... no.. no puedo dejarla.

[...]

Los chicos se reúnen como siempre en el patio, solo que esta vez Nicoll ocupa el lugar de Marina.

-Me siento fatal, nos hemos pasado.-susurra Lucía.

-¿Vosotros habéis notado como nos ha mirado cuando hacia su redacción?-pregunta Jesus.-Me han entrado ganas de llorar.

-¿No os dais cuenta? Intenta dar pena, intenta teneros a sus pies.
No dejéis que lo consiga.-Dice Nicoll.

-Vosotros podéis hacer lo que querías, pero yo no pienso insultarla mas, no se merece esto.-susurra Jesus, levantándose y marchándose.

[...]

Elena llega corriendo al instituto y choca de lleno con Jesus.

-Eh.. lo siento.- se disculpa.

-No es conmigo con quien te tienes que disculpar.

-¿Eh?-susurra.

-Eso, que le estáis jodiendo la vida bien jodida.

La chica vuelve a correr hasta el baño, donde su amiga se encuentra llorando.

-Tia, dámela.-susurra Elena.

-¿Que quieres que te de?-se hace la tonta.

-La cuchilla, se que te has cortado.
Y no voy a dejar que lo hagas mas.

Levanto la mirada y luego niego.

-No.-contesta firme.

#Narra Marina#

-Que no.-digo por enésima vez.

-O me la das o le cuento a los chicos que te cortas.-me amenaza.

-Cuéntaselo, probablemente pasen de ti, no les importo.

Elena se tira a mi lado, dándose por vencida.

-Pues prométeme que no volverás a hacerlo.

-No te voy a prometer eso.-Susurro.

-Hazlo.

Escondo mi mano detrás de la espalda y cruzo los dedos.

-Te lo prometo.-susurro.

[...]

El timbre indica que finalizan las clases.

Salgo andando silenciosamente para volver a mi casa, pero un brazo me lo impide.
Jesus.

-¿Por qué lo has echo?-pregunta.

-¿El que?-pregunto con miedo por si sabe lo de los cortes.

-Lo de mentir.-me dice, firme.

Le pongo cara rara.

-No se de que hablas.
Y tu, ¿Porque lo has echo?
¿Porque de un día para otro me habéis convertido en la falsa, la zorra, la tonta... del instituto?
¿Porque habéis dicho que erais mis amigos cuando en realidad no lo sois?
¿Porque tratáis de hacerme daño?
Ya tengo bastante..-susurro con lagrimas.

-¿Tienes bastante de que?
Sabemos lo de Sara, sabemos que sigue en Londres.
Que tu quieras que este muerta no significa que lo este.-me mira con seriedad.

-¿Enserio crees que yo mentiría sobre eso?
Tu me conoces Jesus.
Creía que confiarías un poco mas en mi.

-Lo hubiera echo si no tuviera pruebas.-susurra dándose la vuelta.-¡No si ni porque pregunto! ¡Si todo me lo vas a negar!

Y se va.

Voy corriendo hacia mi casa con ganas de matar a alguien.

Como coja a Nicoll la mato, os juro que la mato.

Cuando entro en casa, mi madre me espera, esta seria, en la mesa.

-Buenas.-saludo.

-Marina, ven un momento.

Me acerco a ella con miedo.

-¿Pasa algo?-susurro.

-No, nada.
Solo quería comentarte que te he apuntado a un grupo de apoyo.
Con chicos que tienen problemas similares a los tuyos, te ara bien.

Y como siempre, le pongo buena cara y intento sonreír.
Aunque en realidad no me apetece nada ir.

-¿No tengo mas remedio que ir, no?.

Ella niega.

-Empieza esta tarde.

[...]

Y aquí estoy, en una sala con sillones y una mesa en medio.
Con un señor mayor sentado en un sofá negro de cuero, y niños de mi edad.
Todos cuentan sus historias uno a uno.
Algunas son tristes, otras no tanto.
Pero la que mas me sorprende es la de un chico, Hugo.
Es moreno, casi rubio, con los ojos clarísimos y la verdad es guapísimo y no esta nada mal.

-Yo me llamo Hugo, cuando era pequeño me diagnosticaron cáncer, pero lo supere.
Fue muy duro, pero no tire la toalla.
Luego en un accidente, perdí a mis padres y tuve que irme a vivir con mi abuela, que poco después murió en mis brazos.
Una vida muy difícil y llena de baches, pero uno acaba de acostumbrarse.-me mira y me sonríe, que sonrisa mas bonita.- Y le cedo la palabra a la chica nueva.

Solo quiero ser feliz. {Gemeliers}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora