❀ Crush {Todochako} ● !Veinticinco Viñetas

【２０． Ｄｅｃｅｍｂｅｒ】

『 °*• ❀ •*°』

Shoto Todoroki (22) / Ochako Uraraka (17)

• ❀ •
OOC ✫ Age Gap✫Profesor/Alumna

━━━━━━━❈✦❀✦❈━━━━━━━

Shoto Todoroki imparte la más aburrida asignatura de todo el bachillerato: Ciencias Geológicas, una combinación de química, física y matemáticas que aboga por el estudio del planeta.

Aun así, su clase siempre está atiborrada de estudiantes y oyentes.

Al punto en que los alumnos procuran llegar media hora antes, cuando el profesor ya está ahí: calibrando el equipo a utilizar o llevando a cabo anotaciones en el pizarrón. Algunos se quedan de pie al fondo del salón y, otros comparten mesabanco con sus inoportunos compañeros; sentándose en la paleta o en las rodillas de sus colegas.

Y, la razón de tal popularidad es obvia.

Demasiado obvia.

Todoroki es por demás atractivo, un honorable samurái de una antigua era con su apocada forma de vestir y su larga cabellera, además, se comenta que su familia es la encargada del templo de la ciudad.

Y él resulta un poco serio, pero también afable.

—¿Profesor? — Ochako Uraraka alza su manita, y el titular le concede la palabra.

Después de todo, el varón no es un imbécil y está consciente de que la mayoría de su afuero escoge la materia porque buscan contemplarlo, tomarle una o dos fotografías y, cuestionarle acerca de sus preferencias en helados y otras cuestiones. A razón de lo anterior, no es de extrañar que la mayoría apenas si apruebe los exámenes o, simplemente se den de baja a mitad del año escolar.

Empero, existen algunas excepciones.

La jovial castaña es una de ellas, dado que la muchacha en verdad se interesa por la composición de la Tierra y, especialmente, con lo relacionado a la gravedad y sus propiedades. De hecho, ellos ya se conocían previamente de un foro consagrado a las ciencias naturales, en dónde la chica está inscrita bajo el pseudónimo de «Uravity».

Y, Shoto no tiene duda alguna en que Uraraka-chan se convertirá en una excepcional bióloga gravitacional.

Incluso si ella no cree ser capaz de conseguirlo, debido a la precaria situación económica de su familia y su pésima suerte en obtener becas o prestaciones del Estado.

—Si las células están comprometidas a las fuerzas mecánicas de la naturaleza. — Ochako frota sus manos entre sí, porque escribió su interrogante desde casa en un vano intento por parecer más intelectual de lo que realmente es—. ¿Vivir en una zona con una gravedad menor afectaría negativamente a la estabilización mediada gracias al citoesqueleto?

—A nivel citoplasma. — Responde sucinto el educando y, al notar la mayoría de rostros estupefactos, agrega: —A nivel de la membrana de la célula, cambios superficiales.

La bonita castaña asiente, y controla el impulso de prolongar el interrogatorio sobre un tópico que tan sólo a ella y, quizá, a Bakugo le parece relevante. Entonces, ella se cruza de brazos y presta atención al casi monologo de su apuesto e inteligente profesor; suspira, es casi inevitable desarrollar una fijación por Todoroki-sensei y su natural encanto.

Pronto, la muchachita menea la cabeza de un lado a otro.

En un vano intento de erradicar las predecibles fantasías que su mente le proporciona, porque es imposible que un adulto con la vida hecha se pueda fijar en una niñita. Ya que compartir intereses no significa nada en cuestión de afinidad, los vínculos reales no se tratan de si ambos gustan de la misma serie o de símil área profesional.

—Eso sería todo por hoy. — Claudica el alto varón, quién siempre dispone de su clase unos diez minutos antes de la hora oficial de salida —. Por favor, retírense.

Shoto demanda con parquedad, ya que los jovencitos tienen la manía de pensar que el tiempo libre que él les otorga es para avasallarlo a cuestiones personales en lugar de que ellos lo aprovechen para tener un breve almuerzo, platicar con sus compañeros sobre lo ocurrido el fin de semana, acudir a los sanitarios o ponerse al corriente antes de un examen.

—Todos, retírense. — Hace hincapié el de ambivalente cabellera, al notar que ya un par de chicos se han acomodado sobre su escritorio como si éste fuese la mesa cualquiera de un parque—. Con excepción de Uraraka-san, pero si alguien más que su compañera se encuentra en este recinto a la cuenta de tres: iré agregando preguntas a su examen final.

Amenaza con seriedad, y sus alumnos le toman la palabra.

Por lo cual, desalojan el salón de clases y únicamente la representante del grupo 3A se aproxima a su titular.

—¿Cuántas fotocopias serán en esta ocasión? — Ochako atusa su cabellera, la cual parece estar más desordenada de lo habitual cada que se aproxima a Todoroki-san.

—Diez. — Él hace un recuento mental—. P-pero, ¿sería un desperdicio de papel o debería enviárselos en pdf por el grupo de Telegram? — El de bella heterocromía fija la mirada en su alumna, a quién la piel se le eriza al instante—. El otro día, Midoriya-san afirmó que mis métodos son de la vieja escuela y si les doy fotocopias sólo las almacenarán en vano.

La atlética chica no puede evitar sonreír.

Una cálida sonrisa que cimbra al mayor, quién ha avistado a la jovencita de reojo por los corredores o, por la ventana del salón del profesorado.

Y, sabe que tal gesto está reservado para él; para él y nadie más.

—No se preocupe, Todoroki-sensei. — Ella emite una suave risita, congraciada de ser de las pocas que conoce la torpeza de su aparentemente ideal catedrático—. Siempre pregunto al grupo quién las necesita y quién no. — Eleva su manita, otorgando una suave palmadita en el hombro de su interlocutor—. A otros y a mí todavía nos ayuda bastante subrayar y hacer notas, en lugar de sólo leer en el móvil.

Shoto parpadea, obnubilado por la luz que ingresa por las amplias ventanas e ilumina los diáfanos rasgos de la fémina a la cual él habría amado conocer durante su época como estudiante.

—¿Cuántos años tienes, Uraraka-san? — La interrogante se vierte de sus labios sin siquiera pensarlo, sorprendiéndole tanto a él como a su bonita acompañante.

—D-dieciséis... ¡no! — Ella alza ambos brazos y lleva a cabo nerviosos aspavientos, debido a que sus hormonas despertaron de súbito ante la aparentemente inocente cuestión—. Diecisiete, los cumplí en diciembre. A finales de d-diciembre... ¿y usted? — Se atreve a cuestionar y, Todoroki le responde sin problema alguno.

Entretanto, el varón calcula mentalmente y se percata que sólo se llevan un lustro de diferencia.

Así que, tal vez deba a invitarla a salir el próximo diciembre.

━━━━━━━❈✦❀✦❈━━━━━━━

¡A por las últimas viñetas!

Debido a ocupaciones ando escribiendo/revisando mientras ustedes leen esto, así que un saludo enorme y envíen inspiración, que necesitaré montones, mwhhahaha.

Gracias por leer.

『 °*• ❀ •*°』

【ｔｅａｃｈｅｒ】