Zane Kidman pensó que terminaría con tranquilidad su último año en la universidad y su futuro como poeta estaría más cerca de lo que imaginaba, no contaba con lo que su propia facultad preparaba para todos los alumnos, a parte de los dos intercambio...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
"Michael Jackson"
Zane.
Aceptar esa propuesta conllevó los festejos y celebraciones de mis compañeros, habían corrido a abrazarme, se olvidaron de los reclamos hacia la profesora y también de que detesto el contacto físico masivo de desconocidos con los que solo hablo cuando nos dan trabajos en grupo. La cuarta parte de ellos solo conocen mi apellido y no quien soy en realidad.
Cuando Maysee volvió al salón se mostró confundida por el alboroto, me buscó a mí pensando que le daría una explicación. Me limite a sonreírle a medias y dejar que Calem prácticamente le grite en la cara que participaríamos en un programa de televisión. La ojimiel chilló contenta y se abrazó con mi amigo como si su vida dependiera de ellos.
Supe que había hecho lo correcto cuando vi su brillante sonrisa.
Pero todo eso había sucedido ayer. Hoy por la mañana nos explicaron un poco lo que pasaría desde hoy en adelante para nosotros. Asistiríamos a clase desde la mañana hasta la tarde sin descanso entre cursos, por la noche sería el programa, al parecer no era apto para todo el público y admito que eso me preocupó, pues aún seguía pensando que poner a la poesía en esta posición era una mala idea. No quería que la denigren, quería que la aprecien.
Así que las clases que tuve en la mañana estuvieron tan apretadas que por suerte tuve tiempo de respirar, comer y cortarle un rizo a Calem para vendérselo a una chica de economía que me lo pidió por una muy buena cantidad. Solo que no lo hice por el dinero, solo quise molestar a mi amigo.
Ahora iba en la parte trasera del auto de mis padres porque ambos se pusieron de acuerdo en llevarme a las pruebas del programa, acepté que lo hagan porque necesitaba notar de cerca las actitudes que últimamente estaban teniendo, actuaban extraño y yo descubriría la razón.
Primero harían unas pruebas sobre nuestras capacidades de desenvolvimiento frente a cámaras, que tan bueno somos para recordar poemas y enlazarlos, luego de eso dirán quienes participarán frente a cámaras, es ahí donde comenzará el concurso del que aún no sabemos la fecha de finalización.
—Mi bebé saldrá en televisión— mamá voltea a verme, despegó la vista de mi celular para tomar la mano que me ofrece—. Pensé que nada podría hacerte cambiar de idea sobre las cámaras.
Sí, bueno, tal vez fui algo idiota en pensar solo en mi situación y no en la de los demás.
—¿Esta será una oportunidad para que aceptes una sesión de fotos con la nueva línea que sacaremos la próxima semana? — pregunta papá entrando al centro, para cuando el semáforo cambia a rojo.
—No, ni lo pienses— me apresuro a negar—. Solo estoy haciendo esto por la poesía.
