Nefelibata: adj/sus. Que hace referencia a un individuo soñador o fantasioso // que vive en las nubes.
Para poder volar de una historia a otra y entenderlas todas necesitamos alas que nos ayuden a viajar entre tantos mundos.
Ángeles, demonios, ast...
Advertencia: El siguiente escrito habla acerca de deidades (que no son parte de ninguna religión en específico) sin hacer referencia a ningún credo -de manera intencional- Les pido discreción y deseo disfruten su lectura.
𝙰𝙻𝙴𝚁𝚃𝙰 +7𝙺 𝙳𝙴 𝙿𝙰𝙻𝙰𝙱𝚁𝙰𝚂.
"Te amaré sin tener en cuenta las acciones de nuestros enemigos o los celos de los actores. Te amaré sin importar la indignación de ciertos padres o el aburrimiento de ciertos amigos."
- Lemony Snicket. Las cartas de Beatrice
AU donde Izuku es un angel y Shoto es mitad angel, mitad demonio.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
PARTE I: El Origen.
Había nacido del pecado, o al menos eso le dijeron todos.
Representaba el libertinio dentro de la creación más pura.
Era el error dentro de los errores.
Se llamaba Shōto, incluso cuando no debía tener un nombre.
No tenía un par de alas, o una aureola completa, no tenía dos cuernos o una cola.
No era un Ángel, no era un demonio y menos aún un humano.
Los primeros lo detestaban por su mitad izquierda, que representaba el averno y contenía el repudio del Edén en forma de cicatriz.
Los segundos le tenían aversión por la bondad honesta de su lado derecho, que les recordaba el lugar que les dió la espalda sin segundas oportunidades.
Y los humanos...
Los humanos no lo veían.
Vagaba por el mundo, la mitad entre sus dos realidades, porque era el único espacio en que se le permitía ser nada.
No recibía odio ni repudio, no recibía atención o miradas curiosas.
Entre los diversos países que visitó y lenguas que escuchó, se detuvo en lo que llamaban un puente colgante.
Debajo estaba la infinidad del agua, sin criaturas en absoluto.
Mientras recorría la longitud, reconoció una figura humana parada al borde, tentando a la muerte.
Se acercó queriendo decir algo para detenerle, pero...
- No tiene caso, no me escuchará de todos modos- Se dijo a sí mismo en voz alta mientras cerraba sus puños con impotencia, incluso así, era imposible que le entendiera.
