Prólogo

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Nunca estuve de acuerdo con toda esta locura del Laberinto, me parece algo extremo incluso para las circunstancias.

Quizá piense eso porque aún soy joven, pero en mis 15 años de vida puedo asegurar que he madurado lo suficiente para dar una buena opinión.

Además, CRUEL me da muchos motivos para fundamentar mi punto de vista. No puedo creer cuanto odio le tengo a esta institución, bueno, no precisamente a toda; estoy perdídamente enamorado de uno de los de más alto cargo, Thomas.

Es increíble que siendo un año o al menos unos meses menor que yo, tenga toda esa capacidad e intelecto. Claro que no los usa de la mejor manera.

Sin embargo, no importan sus defectos, sus virtudes, nuestra edad, nuestro entorno; ambos estamos dispuestos a vivir a lo máximo nuestros momentos juntos, que se van agotando. Pronto iniciarán las Pruebas, y yo, junto con otros chicos, seremos los primeros en subir por el elevador.

No quiero irme, no quiero dejar a Tommy; y menos por dos años y con Teresa que anda tras de él desde hace tiempo.

Aveces creo que soy algo ingenuo por pensar así, pero aunque tengan que borrar todas mis memorias, no voy a abandonar a Thomas.

- Quisiera poder conservar este recuerdo -le digo a Tommy, mientras lo estrecho contra mi pecho.

- que será difícil -acaricia mi cintura- pero podremos superar esto.

-No tenemos que permanecer aquí -digo-, podemos largarnos y dejar a estos idiotas.

Acaricio su mejilla con ternura.

Niega con la cabeza.

-Tengo que hacerlo, y no quiero dejarte solo con esos monstruos de afuera -no despega su mirada de .

Mis ojos se llenan de lágrimas.

-Pero no quiero olvidarte- se me quiebra la voz al hablar -, y en sus pruebas estaremos en el mismo riesgo.

-Y ahí estaré a tu lado- pone su mano sobre la mía que sigue en su mejilla.

-Si te pierdo, no lo soportaría Tommy- apenas me alcanza el aire para hablar a causa del hipo por llorar.

-No pienses eso, Newt- con el dorso de su mano libre seca mis lágrimas -. No sucederá.

-No puedes asegurarlo. Y tienes que comprender que te amo y por eso no quiero perderte.
-Yo también te amo

También se le escaparon unas lágrimas que cayeron en mi mano.

- Newt, nunca olvides que perderé la memoria, pero jamás a ti.

- Entonces, recuerda que perderé la memoria, pero jamás te alejarás de .

Esas fueron las últimas palabras que le dediqué, todo después de pasar la mejor noche de mi vida. Esa frase fue como una promesa, la más grande que he hecho y por eso, tengo el presentimiento de que la cumpliré pese al aparato que hay en mi cerebro y bloqueará todo, menos mi nombre.

Entonces cerré mis ojos, cediendo a la anestesia.

Perderé la memoria, pero jamás mi amor por ti (Newtmas)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora