Perderé la memoria, pero jamás mi amor por ti (Newtmas)

Capítulo 14

Thomas PROV.

Newt.

Cuanto lo había extrañado. Me alegra que esté vivo, aunque ambos nos encontremos en un embrollo como éste.

Nos detenemos un momento. Gracias, ya no aguantaba ser arrastrado a todas partes.

- Saquenlo y atenlos espalda con espalda -es la voz de Teresa.

Casi de inmediato, desatan la cuerda del saco y me jalan fuera. Suspiro, ya me hacía falta aire fresco.

- Ya vuelvo -dijo Teresa, pero no alcanzo a verla las chicas me tapan la vista- , pero estén listas, en cuanto regrese seguiremos.

Son aproximadamente unas 20 chicas, todas armadas y con apariencia amenazadora.

- Ven, Thomas -dice una chica con un cabello rubio rojizo.

- ¿Cómo sabes mi nombre? -aún soy un boca suelta.

- Era cierto el rumor de que te gustan las preguntas.

No respondo, ya que se escuchan unos sollozos; en cuanto una de las chicas se quita puedo ver que es Newt.

- ¡Newt! -digo conforme nos acercamos.

Él levanta la mirada y sonríe al verme.

- Tommy -susurra.

Quisiera abrazarlo y besarlo en este presiso momento, y lo haría, pero no puedo porque nos atacan espalda con espalda.

- Te extrañé tanto -dijo tomando mi mano.

En cuanto me toca, una tranquilidad me inunda. Parecería una eternidad desde la última vez que sentí su piel contra la mía. Lo necesito tanto, más de lo que pensé. Disfruto su mano contra la mía, aunque haga un calor de infierno, sus dedos están fríos.

- Estás helado -apreto un poco más su mano.

- ¿Eso es lo que dirás después de tanto tiempo? -puedo sentir su sonrisa a mis espaldas.

¡Shunk! Extrañé tanto ese pequeño gesto, y el hecho de que yo lo provoqué hace que las lágrimas me salten de felicidad.

- No es lo único que diré -le aseguré, y respondió acariciando mi mano- . Quiero decirte que eres lo más importante para mí.

Newt PROV.

No. No. No, Tommy, no digas eso.

Eres lo más importante para mí.

- Te amo, Tommy -dije mientras las lágrimas recorrían mis mejillas.

- Te amo, Newt.

No quiero seguir, ya no. Me recuerdo que es para salvar su vida, pero eso no calma el dolor que siento por dentro.

Agradezco que no pueda ver mi rostro, se daría cuenta de que no estoy bien.

- Daría todo por ti -le digo- , arriesgaría todo, solo por verte con vida, Tommy.

Todo.

- Yo también por ti.

- Quisiera mantenerme a tu lado por siempre.

Mi corazón se hace añicos con cada palabra, tanto las que yo digo como las que él me dice.

- Pues quedate a mi lado -contestó- yo te quiero conmigo.

- Está bien, pero si algún día no lo haces, sólo dilo y lo haré.

Todo por Tommy.

Aunque lo ame tanto, puede que algún día ya no me quiera; y entonces me iré, solo quiero que sea feliz. Daría todo por él, sacrificaría mi vida, mi felicidad, mi todo.

- Eso nunca pasará, Newt. Tú eres todo lo que necesito.

No lo merezco. Él es demasiado para mí. No merezco ser feliz, porque ni siquiera logro ser totalmente honesto con él.

- ¿Confías en mí, Tommy?

- Con mi vida.

Me parece que mis lágrimas no se acaban, siguen brotando de mis ojos, ruedan por mis mejillas y mojan mi camisa.

- Entonces, -prosigo- nunca olvides que te amo más de lo que puedo amar a cualquiera.

- No lo olvidaré, porque estarás ahí para recordármelo.

Mi corazón termina de hacerse añicos.

- No queremos interrumpir ni nada -dice Harriet- pero tenemos algunas preguntas para Thomas.

/ / / /

- Newt, calma. Estoy segura de que decidirán dejarlos libres.

Sonia no sabe de lo que habla. Yo solo asiento, no me siento con fuerzas para nada.

- Ahora para esas lágrimas y te llevaré de regreso con él. Te ves más guapo con una sonrisa.

Sonrio de la manera más convincente y la sigo. Aún tengo atadas mis manos, pero he llegado a acostumbrarme.

- Sonia, yo me encargo.

Perfecto, Teresa regresó.

Mi amiga me dedico una mirada tranquilizadora y me dejó con Teresa.

- Aún no nos vamos -le dijo la pelinegra- , solo esperen un poco más.

Sonia asiente y regresa con el grupo.

- No sé si logre hacerlo, Teresa.

- Lo harás bien. Tienes que hacerlo bien.

- ¿Por qué tenemos que hacerlo?

- Ya te lo dije.

- Estoy harto de ese rollo tuyo.

- Mira, Newt, yo no decidí que las cosas fueran así. No tenemos de otra, lo harás te guste o no.

Esto se pone interesante, verdad?

Chero Eaton SMHP