Narrador Omnisciente:
Una vez más tenía al cuervo volando a su alrededor, el joven se limito a mover sus manos bruscamente esperando a que se alejará, pero no fue así. El ave de plumaje negro solo se apego más a él, desde lejos la hada los veía, riendo entre dientes por el pobre joven rubio.
Hace ya dieciocho años los había maldecido a él y a su melliza, lamentablemente la chica quedó dormida para toda su vida siendo que su maldición solo afectaría a uno. El chico se quedó en el bosque tan solo con las tres hadas que para su vista eran inútiles.
Debido a querer alejar al cuervo no vio por dónde iba y termino tropezando, cayendo en el pequeño riachuelo que comenzaba a aparecerse antes de llegar al río.
— Genial... — murmuró ciertamente molesto, solo había salido para caminar un rato y ahora estaba empapado
Maléfica decidió que tal vez sería buen momento para transformar a Diaval en su forma humana, y así lo hizo. El hombre al ver al chico empapado y molesto solo se empezó a burlar a carcajadas.
— Ya cállate, Diaval! — se levantó y lo miro molesto, el pelinegro se limito a sonreír con burla — ¡Te odio! — grito y empezó a caminar en dirección a la cabaña de las hadas
El cuervo solo abrió los ojos como platos al escuchar esas palabras, nunca se las había dicho, tal vez no había contado con el joven estaba molesto desde hace varios días y molestarlo solo lo hizo proyectar su enojo en él. Maléfica a los lejos rio entre dientes al ver a su ayudante en aprietos.
El joven caminaba y era seguido por el cuervo quien trataba de alcanzar su paso.
— _________, espérate. — logró tomarlo de la muñeca para que detuviera su paso, el mencionado volteo a verlo con el ceño fruncido
— ¿Qué quieres? — le pregunto soltandose del agarre el contrario, se volteo completamente para quedar cara a cara
— Oye tranquilo, solo estaba jugando ¿Por qué te enojas tanto? — pregunto cruzándose de brazos, el joven no solía comportarse de ese modo
Soltó un suspiro para calmarse — Perdón, Diaval, pero es que... Esas tres hadas me tienen tan harto. — contesto un poco más tranquilo — Solo deja voy a cambiarme y... No sé... ¿Vamos a caminar? — sugirió
— ¿Y por qué no ahora? — no quería tener que esperarlo fuera de esa sucia cabaña, el joven rio entre dientes
— Porque mi ropa está mojada y mi camisa se transparenta. — se señaló a si mismo, con su pantalón no había problema, pues era negro, pero su camisa era blanca
(Le digo camisa porque no sé cómo se llama está webada ↑)
Diaval ni siquiera había notado aquello, hasta que se lo menciono y entonces no pudo apartar la vista de su pecho y abdomen. La camisa se pegaba a su piel y dejaba ver toda la parte de arriba de su cuerpo. Se sonrojo y desvió la mirada.
— O-ok, te espero. — respondió para así seguirlo desde lejos hasta casa de las hadas
Espero a varios metros desde lejos, recargado en el tronco de un árbol, pensando en como su ropa se transparentaba y dejaba ver su abdomen. Su cubrió la boca tapando igualmente un poco del sonrojo que se había formado en su rostro, soltó un suspiro y sacudió su cabeza para volver en si mismo, algo que logró a medias debido a que esa imagen no salía de su cabeza y su imaginación empezaba a actuar haciendo escenarios clichés y escenarios totalmente inapropiados como para ser mencionados explícitamente. Paso sus manos por todo su rostro para intentar calmarse, soltando un bufido al mismo tiempo que bajaba ambas manos por toda su cara.
— ¿Estás bien? — escucho la voz del rubio, se sobresalto ligeramente
— S-sí... — se aclaró la garganta — Solo es algo de calor. — respondió finalmente para así empezar a caminar con el joven a su lado, lo miro de reojo notando que su muda de ropa no había cambiado mucho
(#NoseDescribirRopaDelSigloIX)
— ¿No tienes otro color de camisa? — pregunto con cierta burla
— ¿No tienes otro color de ropa en general? — devolvió la burla, pues el cuervo siempre vestía de negro, ambos rieron
— Bien jugado niño. — le revolvió el cabello como cuando el rubio era un niño, solo que aquellas veces volaba sobre su cabeza revolviendo su cabello
— Oye! Me acabo de peinar! — le reclamo tomando su muñeca — Mejor así. — dijo entrelazando su mano con la del pelinegro, el cual se sonrojo al notar está acción
— ¿El niño necesita que lo tomen de la mano? — desvió la mirada evitando que el menor notará su rostro carmesí, escucho una risita de su parte haciendo que su corazón se acelere brutalmente
— No, solo me gusta tener contacto contigo. — sonrió dulcemente apegandose a él para recargar su cabeza sobre su hombro — Me gustas, eso es todo. — soltó de la nada, a Diaval le recorrió un escalofrío al escuchar esas palabras
— No digas tonterías. — rio nervioso tratando de evadir el tema con algo de comedia
— Es en serio, si me dejaras en paz al menos unos cinco minutos no me gustarías, así que... Es tu culpa. — rio entre dientes logrando que el cuervo enrojeciera de la vergüenza
— Me vas a matar de infarto __________... — tocío un poco tratando de aclarar su garganta por los recientes nervios
— Yo también te quiero. — respondió provocando que el pelinegro se ahogara con su propia saliva
.
ESTÁS LEYENDO
One-shots | (Male Character × Male Reader) | Vol.1
Fanfiction[PEDIDOS CERRADOS] [Volumen 2 disponible en mi perfil] Los pedidos están abiertos (solo cuando doy el aviso), ya sea para pedir alguna serie, anime, película, etc; o personaje, o situación. Estoy abierto a peticiones, hasta las más inusuales. Solo...