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— si entonces por eso- — el japonés fue interrumpido a mitad de su historia que contaba con tanta emoción.

— nakamoto — decía la enfermera que acababa de llegar — tienes una visita.

al escuchar eso yuta rodo los ojos un poco molesto y al momento de que entró la visita, fingió una sonrisa — mark, querido — decía mientras estiraba sus brazos para recibir a la visita en ellos.

taeyong recuerda que yuta le conto que se caso con mark hace unos 3 años, pero nunca en su vida lo amo. su corazón estaba totalmente dedicado a otra persona, pero esta se fue antes de que yuta pudiera confesarse.

— ¿Cómo estas? — preguntó mark dándole un beso en la mejilla, este chico vestía muy elegante, tenía un traje azul, camisa blanca bajo esta y corbata negra. definitivamente tenia dinero.

bien, solo un poco cansado.

— cuanto tiempo te quedaras aquí? — dijo mientras sostenía las manos de yuta y se sentaba en la parte trasera de la camilla.

es hora de irse... pensó taeyong bajando de la camilla, había pasado ya unos 3 días en el hospital, y podía moverse un poco mejor.

pero al momento de salir del cuarto choco con alguien y este lo sostuvo del brazo para que el pelirrojo no cayera, pero si se cayeron muchos pétalos rojos de un ramo de rosas — oh, lo siento — dijo un chico muy lindo, tenia una mirada amable y sin duda sus disculpas fueron sinceras — estas bien?

— si, perdón no me fije y por mi culpa se arruino el ramo de flores.

el contrario solo rio — esta bien, de todas formas — paró de hablar mirando...a yuta, y sonriendo tristemente — no recibiría mis flores...es tarde para eso.

taeyong miro como yuta hablaba y sonreía con su esposo. — quieres que te invité un juego?... ahí maquinas expendedoras en el segundo piso — el pelirrojo sonrió para hacer que el chico se sintiera cómodo.

— si, claro...oh, espera — decía mientras ayudaba al pelirrojo, poniendo las manos de este en el hombro del contrario para que este caminara mejor, ya que este salió con prisa, olvido su bastón. — déjame ayudarte, bien...vamos.

caminaron hasta el ascensor y mientras esperaban, taeyong saco su mano del hombro del chico y se presentó — un placer, soy kang taeyong — le regalo una sonrisa y estrechó su mano.

— dong sicheng — tomo la mano del pelirrojo — un placer.

este tierno saludo no duro mucho, porque el ascensor llego...con alguien dentro de el.

— ...que haces aquí?, no deberías estar en la camilla? — preguntó el pelinegro.

— aaaah, solo córrete — decía mientras empujaba ligeramente a doyoung, con ayuda de sicheng subieron al ascensor, pero doyoung también se quedo en el ascensor.

— podrías sostener esto?, por favor — dijo sicheng mientras le entregaba el ramo de rosas que estaba un poco descuidado.

— claro — respondió, tomando el ramo y recibiendo una cara de disgusto de doyoung, pero el pelirrojo no se percató de esta.

— a si que...a dónde vamos? — preguntó el pelinegro.

— yo... y sicheng vamos a tomar jugo — decía con obviamente — yo y sicheng.

— yo también quiero...jugó, voy con ustedes.

taeyong en su interior se sentía un poco feliz por eso, le gustaba que doyoung estuviera con el, pero no tenia de idea del porqué.

[¿Por qué eres tan estúpido?] dotaeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora