RELATOS DE UN AMOR

Capitulo 10

Pasaron varios días en los que ambas se extrañaron mucho, pero ninguna fue capaz de escribir o llamar, sus sentimientos estaban confundidos y el miedo se había apoderado de ambas.

María Victoria estaba concentrada en su trabajo como cada vez que quería escapar del mundo y mientras tanto Ana cumplía con su agenda y ocultaba su sentir entre conciertos y entrevistas

Los días pasaban a la velocidad de la luz y como si todo se acomodase a su favor, María Victoria tuvo que viajar hasta Miami a acompañar a su hermana, hasta que en pleno centro comercial el destino apresuro los planes de volverse a ver con aquella mujer que sin saber como o porqué, había dejado de ser solo su cantante favorita sino también quien se adueño de todos sus pensamientos sin siquiera pedir permiso.

Ana llevaba una semana de vuelta en Miami y estaba en el centro comercial con Diana Veronica, quien era su mejor amiga y confidente, aunque durante años Diana estuvo enamorada de Ana pero las cosas nunca se dieron.

María Victoria se encontraba saliendo de un almacen en compañía de Su hermana, mientras revisaba su celular chocó con alguien accidentalmente

MariaV: Lo siento No me fi.... Ana
Ana: María Victoria eres tú

Una alegría se apoderaba de ambas al volverse a ver después de extrañarse tanto pero al mismo tiempo sentían miedo de no saber disimular sus verdaderos sentimientos

MariaV: que alegría verte _ la abrazó

Ana: te he echado de menos bonita_ decía mientras se aferraba a los brazos de los cuales no se quería separar

La hermana de María Victoria y Diana Veronica se miraban extrañadas al no entender la situación

MariaV: que pena, Ana te presentó a mi hermana

Xx: mucho gusto, mi nombre es Paz

Ana: el gusto es mío, les presento a Diana, mi mejor amiga

Diana: mucho gusto

Ana: Chicas si no es molestia, me gustaría poder hablar 5 minutos con María Victoria de algo importante

Diana y Paz: por supuesto

Se fueron a una banca aparte y empezaron a hablar de lo que Ana tenia por decir

Ana: Te extrañe mucho bonita

MaríaV: yo también te extrañe muchísimo

Ana: se que fue una cobardía no volver a llamar ni escribir pero debíamos aclarar muchas cosas creo yo

MariaV: tienes toda la razón, habían muchas cosas por pensar, pero parece que el destino nos quería juntar

Ana: si, estoy de acuerdo, pero creo que este no es el lugar adecuado, hasta cuando estarás en Miami?

MariaV: hasta mañana por la mañana, mi vuelo sale a las 08:30

Ana: parece que siempre estas corriendo, pero te parece si aceptas una invitación a Cenar?

MariaV: acepto pero con la condición de que sea en el apartamento donde me estoy quedando, así podré cocinar

Ana: esta bien, mándame la dirección y allí estaré esta noche a las 07:00

MariaV: perfecto, ahora volvamos con las chicas y sigamos con lo que estábamos o no acabaré las compras con Paz

Ana: tienes toda la razón y María Victoria realmente te extrañe

MariaV: y yo a ti mi querida Ana

Sé dieron un abrazo y volvieron con las chicas, se despidieron y cada una siguió su rumbo. Ana estaba decidida a hablar de sus sentimientos a como de lugar porque sin darse cuenta en cuestión de días se había enamorado de aquella chica bonita de ojos penetrantes; mientras que por otro lado María Victoria no podía borrar esa sonrisa del rostro desde que vió nuevamente a Ana, ella sabía que ese sentimiento no era simple admiración, sabia que la estaba queriendo como nunca había querido y aunque sus prejuicios le jugaran una mala pasada al saber que se había enamorado de otra mujer, su verdadero miedo era descubrir que Ana no sienta lo mismo, aunque para ella Ana era alguien inalcanzable, era la estrella más hermosa y brillante de su firmamento