Capitulo 34

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Nos besamos unos minutos más, sin segundas intenciones, solo queríamos sentirnos nuevamente, nos separamos y junte nuestras frentes, con una sonrisa en nuestros labios

MariaV: te vas a quedar conmigo?

Ana: yo te amo más que nada, más que a mi vida, pero estás segura de esto? No quiero que te arrepientas más adelante

MariaV: Ana, solo dame un poco de tiempo para irlo asimilando, si mis recuerdos no vuelven entonces crearemos nuevos recuerdos juntas, yo me siento bien contigo, yo estoy sintiéndote tantas cosas por ti, me llenas de paz, tu presencia me hace sentirme viva y tus besos wow, no recuerdo haber besado unos labios tan perfectos

Ana: jaja quizás no lo recuerdas pero lo has besado muchas veces, respecto a lo otro, esta bien, iremos lento, pero no sueltes mi mano, yo te sostendré en todo el proceso, por favor no nos perdamos

MariaV: ya no lo volveré a hacer, no te volveré a soltar, pero

Ana: pero que?

MariaV: crees que pueda besarte nuevamente _ agache mi rostro_

Ana: eres una cosita tan tierna, mi amor el que yo sea tu prometida quiere decir que puedes besarme cuando quieras, además a mi me encanta besarte y más aún si eres tu quien me besa

MariaV: eso suena bien, ahora ven aquí, quiero muchos besos, quizás recuerde algo

Paso una semana y las cosas iban mucho mejor, el simple echo de poder besarla o dormir abrazada con ella, había renacido sentimientos en mi, me sentía bien, aunque aún no recordaba nada, ana me pidió permiso para traer un amigo suyo a almorzar a casa, insistí en que no necesitaba mi autorización así que Nora preparó un almuerzo especial para que almorcemos todos.

Ana: mi amor me veo bien así?

MariaV: te ves hermosa Ana

Ana: cuando dejarás de llamarme por mi nombre?

MariaV: te ves hermosa mi amor

Ana: eso se escucha mucho mejor, además quiero estar hermosa solo para ti

MariaV: claro que si, tu eres hermosa siempre, pero solo yo puedo besar y amar a mi hermosa prometida

Ana: te amo mi bonita_ besó mis labios y me tomó de la mano para irnos a la sala a esperar su visita que ya venia en el ascensor_

El timbre sonó y un hombre alto de cabellos oscuros y contextura delgada apareció en nuestra casa, sentí que algo recorrió mi cuerpo dejándolo con un sentimiento de rabia pero no sabía exactamente porqué.

Ana soltó mi agarre y se acerco a él con una gran sonrisa, este la levanto en brazos, le dió un beso en la mejilla y empezó a dar vueltas con ella, sentí un fuerte dolor de cabeza al ver esa escena y a mi menté llegaron imágenes de Ana y él besándose en una presentación, luego en un pasillo y mi cuerpo se estalló en rabia

Ana: María Victoria el es Samuel, mi amigo pianist..

MariaV: Ana podemos hablar a solas

Ana: eh si, Samuel permítenos un momento, por favor

Nos dirigimos a la habitación y yo no entendía si era mi imaginación o en realidad estaba recordando escenas de ellos juntos y eso me molestaba mucho, no podía ni quería verla en otros brazos

MariaV: has tenido algo con ese hombre?

Ana: que dices mi amor?

MariaV: que si tu has tenido algo con ese hombre Ana, responde

Ana: bueno no, solo fueron algunos besos en el pasado en forma de broma, pero nunca una relación o algo así, solo es un gran amigo

MariaV: quiero que se vaya de mi casa

Ana: que?

MariaV: quiero que este hombre salga de mi casa, ya

Ana: mi amor que sucede? Estas celosa?

MariaV: No, si, no se, solo sácalo de mi casa, por favor

Ana: mi cielo no debes estar celosa de nadie, yo te amo solo a ti, pero como le voy a decir que se vaya si acabo de llegar?

MariaV: Quiero que se vaya Ana, auch_ mi cabeza volvió a doler más fuerte y en un momento todo se volvió oscuro _

En mi mente pasaban miles de imágenes como la producción de una película, en cuestión de segundos veía mi vida reflejada en mil escenas; desperté lentamente con un fuerte olor a alcohol, abrí los ojos de apoco y estaba en mi habitación acostada, Ana y Nora estaban junto a mí, sonreí al verlas

Ana: estás bien?

MariaV: tienes razón

Ana: que? En que tengo razón?

MariaV: no deben gustarme todas las mujeres, con que me guste mi prometida es suficiente_ sonreí _

Ana: de que hablas mi amor

MariaV: mis recuerdos ana, volvieron, no te olvide mi amor, pero odio haberte visto besar con Samuel

Ana: mi amor, estoy tan feliz por ti, por nosotras, te amo

MariaV: te amo tanto vida mia, oye fui un poco grosera con Samuel hace rato, pero enserio, no quiero que nadie aparte de mi, te de besos, solo yo puedo

Ana: Mi amor yo soy toda tuya en cuerpo y alma, no quiero besos que no sean tuyos

Nora: yo creo que ya esta mejor señorita, estaré en la cocina si me necesitan

MariaV: muchas gracias Nora, podría cerrar la puerta cuando salga, por favor

Nora: si señorita, con permiso

MariaV: Gracias

Ana: que planeas amor?

MariaV: me has hecho muchísima falta y quiero hacer el amor con mi mujer todo el día

Ana: me encanta la idea, pero mi amor no creo que sea conveniente que Nora escuche nuestros momentos íntimos, no podría mirarla de nuevo a la cara

MariaV: eso no es problema, nuestra habitación es insonora mi amor, creo que nunca te lo mencioné, ahora ven aquí

Como si fuese la primera vez, nos amamos más que nunca, fue como el reencuentro de dos almas, besamos cada rincón de nuestros cuerpos, dejamos que nuestros cuerpos bailaran al ritmo del placer, nos regalamos gemidos, gritos ahogados de sentir, fuimos hasta el final del precipicio varías veces esa tarde, con nuestros cuerpos ardientes de deseo y nuestras almas rogando por volverse una sola, nos amamos como pocos sabían hacerlo, con toda la entrega, hicimos el amor como máxima expresión, nos volvimos una y sellamos ese pacto que estaba escrito desde siempre en nuestro destino, sabiendo que sin importar las pruebas que viniesen, las afrontaríamos juntas, con un mismo corazón latiendo con más fuerzas que antes.

RELATOS DE UN AMORDonde viven las historias. Descúbrelo ahora