18.

3.3K 347 191
                                    

No he podido levantarme de la cama en todo el día, le dije a las chicas que me había enfermado, tuve que aguantar toda su morbosidad, sus comentarios irrespetuosos y algunas risas que me sacaron.

Chaeyoung nunca se fue de la casa, de eso estoy segura porque su ropa sigue aquí, ella no, pero la ropa sí.

No entiendo porqué acyua de esa manera, esa clase de personas que se ciega por molestia o por rabia no me gustan, son  las que he evitado todo este tipo y odio que me guste.

Chaeyoung me gusta, más allá de una atracción física, de que nos besemos o el acto sexual, ella entro a mi vida y ahora no se como arrancarla de ella.

Me duele todo de la cintura para a bajo, mis ojos se llenan de lágrimas cuando me levanto a ver en donde está o si es que ya tiene otra ropa.

Salir de la habitación es el primer reto que cumplo, apoyada de las paredes con mi mano derecha y con la izquierda intento hacer presión en mi vientre, me duele demasiado.

— Buenos di-...Dios mío Mina —Si rostro de brillar paso a entristecerse, no entiendo, no se si es que se esta disculpado o que de verdad siente algún arrepentimiento por lo que hizo— Lo siento tanto, perdóname —Se acerca y me ayuda a recostarme en el sofá.

—Pásame una pastilla—Digo y me quejo del dolor— Dos —Me corrijo— La del dolor y el anticonceptivo —Señalo con los ojos entre cerrados la estantería— Más te vale que no me toques y tampoco me mires en lo que resta de día.

No habla, solo se levanta las busca y me las pasa, parece un robot apenas y movió la mano para darmelas, se sienta a mi lado y aunque no esté haciendo contacto visual conmigo se que esta aquí para cuidarme, suspiro, calmando toda la rabia que tengo en mi interior y sonrío un poco. Cerrando los ojos sintiéndome a gusto.

— Casi rompo la cama anoche —Se que quiere aliviar el ambiente pero no creo que sea el mejor momento ni la mejor oración que pudo decir.

Abro los ojos y la miro, odio llorar frente a los demás, seco las lágrimas que corren por las esquinas de mis ojos— Deja de hablar —Ella se voltea y me ve, limpio las lágrimas y me doy la vuelta, dándole la espalda— Te pedí que nunca me lastimaras.

— Mina lo siento, no fue mi intención —Se infanta disculpar, joder, fue ella la que me cogio como si yo fuera una puta barata.

— ¿No fue tu maldita intención penetrarme incluso escuchando mis sollozos?, te mordí el hombro para que pararas.

— Pensé que eran gemidos, no escuchaba bien además de que los sollozos pue-

— Deja de ser mi maldita instructora sexual porque ya no lo eres —Me siento en el sofá y me inclino para verla a los ojos— Deja de actuar como si quieres enseñarme, siempre lo que has querido es coger conmigo y lo hiciste... —Clavo los codos en mis muslos, no quiero gritar de dolor— Tu problema es que no eres de una sola mujer, tu problema es que no puedes dejar tu trabajo ¡ese es tu maldito problema! —Yo nunca pierdo el control, es más me impresiona que lo haya hecho, gritar no es algo común en mi.

— Mina... —Me levanto y cuando doy dos pasos el mundo se sacude, siento que me están clavando agujas en la espalda y que aplastan mi cabeza— Cuidado Mina te puede...

— ¡Vete de mi maldita ca-

Y antes de terminar la oración, mis ojos se ciegan, todo se vuelve blanco y luego oscuro.

Y antes de terminar la oración, mis ojos se ciegan, todo se vuelve blanco y luego oscuro

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

"Todo va a estar bien".

Fue lo que me dijo Chaeyoung antes de separarse de mi, dejarme con estas personas que no conozco, que me examinan, que me tocan y me inyectan cosas que no se para que son.

Apenas puedo mantener los ojos abiertos, las punzadas en mi cabeza no han bajado y las ganas que tengo de asesinarla se acumulan en mi ser.

De pronto todo queda en silencio, las personas dejan de hablar yo comienzo a escuchar con más claridad la conversación que hay entre dos personas fuera de la habitación, justo en la puerta como si estuvieran peleándose por quien entra y quien no, que es justamente lo que hacen.

— Voy a ir yo y punto —La puerta se abre y veo a Momo, sus ojos cristalizados, esto solo pasa cuando esta muy molesta y se ve en sus ojos.

— Momoring —No se si estoy drogada o que de verdad me pareció lo mejor del mundo verla entrar a ella en vez de a Chaeyoung.

— ¿Que te pasó? —Mis manos sube a su cuello y la atraigo para pegarla a mi pecho, beso su cabeza y sonrío.

— Yo estoy bien ¿dónde está Tzuyu y las demás? —No quiero hablar del tema, no sabiendo que si le digo matara a Chaeyoung y es que aunque quiero que eso pase no puedo dejar que lo haga.

— Están en el trabajo, Tzuyu tenía una sección de foros importante y...las demás están algo ajetreadas con el trabajo, la única que estaba medianamente libre era yo y por eso vine —Sus ojos recorren mi rostro y me vuelve a abrazar— No me digas que estás embarazada.

— No, el esfuerzo físico me puso así, además de que no había comido —Entre cierra los ojos y asiente con lentitud— Créeme, es eso.

— Chaeng quiere entrar...¿quieres que la deje pasar o no? —Si le digo que si tendré que actuar como si no me importara y se que eso será difícil porque quiero matar a Chaeyoung, y si le digo que no ella buscará la forma de sacarme la razón del porque no dejo que entre.

— Déjala entrar —Antes de que Momo abra la puerta, Chaeyoung la abre y entra, sus pnso están rojos y sus labios un tanto abultados, ahora que la veo puede ser tierna.

— ¿Estas bien? —Se anticipa a mi repuesta y me abraza, sollozando en mi oído, Momo me mira confundida y yo a ella— Ya de-deje el trab-trabajo —Murmura y sonrío levemente acariciando su cabeza, mi mejor amiga me ve y sonríe, señala la puerta y entiendo de que debe irse, le lanzo un beso y ella me lanza uno a mi.

— ¿Querias eso? —Me preocupo por ella.

— Te quiero a ti —Sonrío levemente y acaricio sus mejillas— Todo lo que se te lo enseñaré —Elevo una ceja, ya le había dicho que no la quiero que instructora— Solo si tu quieres.

— Quiero algo... —Me mira con determinación— Que te calles y me beses —Amo si sonrisa sobre todo cuando la hace tan grande que sus ojos se cierran, me besa lentamente, como si quisiera entrar en mi de otra forma, me separo un poco— Esta v-

— Esta vez no te voy a herir —Eso era lo que quería escuchar.

sex education ; 𝗺𝗶𝗰𝗵𝗮𝗲𝗻𝗴Donde viven las historias. Descúbrelo ahora