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A todas mis Winter babys, sobre todo aquellas que están viviendo momentos difíciles en sus países. También soy latinoamericana y mi corazón está con ustedes.

                     Después de un largo entrenamiento, Bucky se dirigió a su recámara para darse un largo baño, cuando divisó en el suelo un sospechoso papel blanco

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                     Después de un largo entrenamiento, Bucky se dirigió a su recámara para darse un largo baño, cuando divisó en el suelo un sospechoso papel blanco.

    —¿Qué es esto? —Bucky se agachó a recoger el sobre que estaba frente a su puerta.

    La curiosidad lo mataba, quizás se habían equivocado y lo dejaron allí, pero descartó la idea en cuanto leyó su nombre en el blanco papel. Alguien le había enviado una carta, increíble, porque no parecía algo formal, lo que podía ser hasta una broma de alguien sin mucho trabajo.

    Con el interés bullendo en su interior se adentró en habitación, abrió el sobre y se dispuso a leer. Necesitaba saber para que querría alguien escribirle a él. Pero lo que leyó le sorprendió, no esperaba una declaración, lo que lo confundió aún más, si era posible.

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    ¿Existe el hubiera? Es lo que me pregunto en cuanto pienso en ti. ¿Y si te hubiera conocido décadas atrás? Ahí es cuando lamento haber nacido en épocas distintas, pero luego recuerdo que te tengo en esta, que puedo verte siempre, aunque no tanto como quisiera.

    ¿Y si hubiera llamado tu atención cuando nos conocimos? Quizás no lo sepas, pero nuestros caminos se cruzaron en algún punto y por mucho tiempo quise acercarme a ti, pero no tuve el valor para hacerlo.

    ¿Y si hubiera dicho lo que siento cuando tuve oportunidad? Suelo ser valiente para muchas cosas, pero cuando se trata de ti, esa palabra no existe en mi vocabulario. Porque entonces digo y, ¿si me rechaza?

    Y sé que quizás sea cobarde de mi parte escribirte y mantenerte con esa incertidumbre de no saber quién te envía cartas, pero es todo lo que soy capaz de hacer, porque tú me vuelves un completo caos.

    Por favor, si algún día lo descubres no me odies, sólo quería decirte la manera en que me haces sentir, porque aunque te creas un monstruo, eres capaz de hacer tambalear mi corazón, James Buchanan Barnes.

    Con amor,
La chica de corazón tambaleante

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    Cuando terminó de leer no supo cómo sentirse, confundido, feliz, enojado. ¿Quién le escribiría a él? ¿Le importaba a alguien? ¿Y sí era una broma?

    No sabía bien que hacer, pero entonces pensó en Steve, quizás él podría ayudarle, o tal vez Sam. Salió del lugar a paso veloz y en cuanto divisó a Sam y Steve en el gimnasio, les hizo una señal para que fueran a su encuentro.

    —¿Se puede saber qué te hicieron para que tengas esa cara? —el rubio ni siquiera esperó que su mejor amigo le dijera porque estaba ahí, su cara ya decía mucho y preguntó directamente.

    —Es que… bueno, me han dejado esto frente a mi puerta —señaló la hoja en sus manos, con gesto confuso—, ¿por qué alguien me escribiría?

    —Déjame ver —si bien, Steve respetaba la privacidad de los demás, no era normal el estado en que se hallaba su amigo—. ¿Tú qué crees Sam?

    Le pasó la hoja a Falcon, que en cuanto la examinó, sonrió como el gato de Cheshire en dirección a Bucky.

    —Usted amigo mío, tiene un admirador secreto —el castaño ojiazul lo miró sorprendido—. Y por lo que dice, parece ser una mujer.

    —Esto debe ser una broma —pasó una mano por su nuca en señal de nerviosismo.

    —No lo creo, Buck, se ve bastante serio —el capitán sonrió. Al parecer su amigo tenía a alguien por allí escondido.

    —Tú sólo lee todo lo que te llegue, quizás eso te dé un indicio —indicó Sam.

    —Eso haré, gracias.

    Tras esas palabras se marchó. Volviendo a la comodidad de su alcoba y sintiéndose confiado y libre, sonrió. Él se consideraba un monstruo, pero para alguien más era la causa de que su corazón temblara.

    «Ojalá sea cierto, que no se trate de alguna broma», pensó, doblando el sobre y depositándolo en la caja donde guardaba sus pertenencias de la Segunda Guerra Mundial.

Escrito: 5/May/2021

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Escrito: 5/May/2021

Aclaro que la mayoría serán cartas.

Gato Chashire: también conocido como gato risón o sonriente. Es el gato de sonrisa siniestra que aparece en las obras de Lewis Carrol: «Alicia en el país de las maravillas» y «Alicia a través del espejo y lo que encontró allí».

Mil gracias por todo el amor recibido. Besos y abrazos. 💛

ᴡᴀɴᴅᴀ's ʟᴇᴛᴛᴇʀs | 𝑊𝑖𝑛𝑡𝑒𝑟𝑊𝑖𝑡𝑐ℎ | 𝐶𝑜𝑚𝑝𝑙𝑒𝑡𝑎✓Donde viven las historias. Descúbrelo ahora