Capítulo 24: MTV

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-¡Bienvenidas al Staples Center! –anunció Iván con una sonrisa–. Ya sé que últimamente han pasado demasiado tiempo aquí, pero esta vez cantaran para las 20 000 personas que caben en este lugar.

-¿Se vendieron todos los boletos? –preguntó Ness.

-Sí, y los de las dos fechas, de hecho hasta faltaron boletos...

-Fabuloso.

-Así es, ahora a ensayar –Ness y mi hermano avanzaron hacia la entrada, Iván me tomó de la mano-. Annie ¿Puedo hablar contigo?

-No hay opción ¿O sí? –Él negó con la cabeza-. ¿Qué?

-¿Qué fue lo que pasó? ¿Por qué estas triste?

-Por nada. Simplemente estoy tratando de concentrarme en algo que sea de verdad importante y esto lo es. ¿Te importa si me voy a ensayar?

-No, adelante –empecé a caminar–. Oye, quizás no sea el mejor momento pero visitaran DC en esta gira.

-¿Por qué?

-Ness y tu hermano pensaron que te gustaría la idea.

Seguí caminando con la cabeza baja, ni siquiera los gritos de mis fans me podían sacar de mis pensamientos, los escuchaba cantar, los escuchaba decir mi nombre, los escuchaba decir cuánto me querían pero era como si no fuera realmente yo, era como si Annie se hubiera ido, como si le hablaran a una desconocida... ya nada podía tener sentido, ya no los tenía a mis lados apoyándome, ya no habría “Liga de la Justicia” que era como Nick nos había nombrado cuando éramos niños, ya no habría más aventuras juntos, ya no habría más risas; ahora solo seriamos: Los Jonas Brothers y Moontrimmer; dos grupos separados.

Noté que estaba llorando pero para entonces ya había llegado al interior del foro. Caminé hasta los camerinos sin ser realmente consciente de lo que hacía, ensayamos lo necesario antes de irnos a almorzar, hice lo que debía pero nada más... Me sentía de nuevo como una lata vacía, pero ahora era mucho peor, muchísimo peor que la última vez porque ahora no solo había perdido a cuatro amigos, también había perdido a la persona que más amaba en esta vida.

Dos meses después, de alguna manera, y sin saber exactamente cómo, había logrado separar los dos hechos en mi vida: El primero, la separación prácticamente permanente entre Derek y yo y mis mejores amigos; y la segunda: Nuestra primera gira. Había platicado con Derek sobre lo que íbamos a hacer ahora y era como si mi mundo se hubiera dividido en dos: el bueno y el malo. De esa manera había logrado enfocarme al 100% en los conciertos, haciendo de cada uno de ellos toda una experiencia; habíamos hecho que Jeremy convenciera a la disquera de regalar BACKSTAGE PASSES por medio de las estaciones de radio, así que cada noche convivíamos con diez afortunados. Y por las noches cuando todos nos íbamos a dormir –ya fuera en el autobús o en algún hotel, dependiendo de a donde tuviéramos que ir al día siguiente–, podía sacar todo el dolor que sentía sin afectar a nadie más que a mi misma.

Ness y Derek creían que ya lo había superado, pero no. Simplemente trataba de aparentar estar bien. Olivia siguió contestando su mensaje, May estaba componiendo algo con su violín y Derek hacia otro tanto con su guitarra, los chicos de la banda venían riéndose escandalosamente al fondo del bus, yo escribía en mi cuaderno. El bus se detuvo en una cafetería a mitad de la carretera, una de esas cafeterías a la mitad de la nada, pero cuando se tiene hambre ni siquiera importa el lugar. Así que nos pusimos los abrigos, tomamos los paraguas y salimos a la lluvia. Caminamos hasta la cafetería y aunque el pequeño establecimiento estaba en el lugar más lúgubre que me podía imaginar el interior me resulto increíblemente acogedor. Nos sentamos todos alrededor de tres mesas, y esque éramos bastantes contándonos a nosotros, los muchachos de la banda y los chóferes.

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