CAPITULO 44

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Me congelo en mi lugar al escuchar esa voz. Mi vista se distorciona por microsegundos en lo que reacciono a lo que está pasando. Trago alejando el celular de mi cara cerrando los ojos unos momentos antes de susurrar.

-Ayúdenme.

La acarada me supera haciéndome sacar todo lo de mi estómago, puedo sentir la debilidad de mi organismo y a las voces decirme muchas cosas feas pero terminan apoyándome y diciéndomeque hacer.

Hazlo hablar.

Asiento regresando el celular a mi oído. Me relamo los labios exhalando con frustración antes de sentir como ellas logran su cometido.

- Extrañarte es una palabra demasiado corta para lo que siento ahora. - murmuro limpiandome la boca del vómito, me pongo de pie y camino debilmente a la cocineta por una botella de agua.

- Me alegra oírlo. Escuché que tuviste miedo y decidiste alejarte de los problemas. - su voz distorcionada me cierra la garganta con miedo pero las voces comienzan a tomar el protagonismo en mi cabeza, de este modo alejan a los recuerdos.

- No es miedo, simplemente sé que peleas valen luchar. Pero cuéntame , ¿como me encontraste?.

- Tu partida dejaría paz en este lugar, pero lo único que ha pasado es caos. - suena molesto y frustrado a cada palabra.

- Mi especialidad.

- Debo decir que era un buen plan. La persona que lo hizo debe ser inteligente. - me quedo en silencio recordando a Miles.

- ¿Tu como sabes que no lo hice yo?.

- Por tu falta de paciencia. - se burla.

Finje una pequeña risa y destensate, no dejes que sepa que tiene control sobre ti.

Hago lo que las voces dicen y tomo un trago de agua apoyandome contra la encimera. Calma Camille, ya pronto lo acabarás, tranquila, respira.

- Correcto.

- Verás conejita, tu caos no me a gustado en lo absoluto, esta jodiendo muchos de mis planes. - su tono se vuelve más serio y yo me siento más relajada.

- Una lástima.

- Tu y yo hicimos un trato de lealtad conejita, no me hagas recordártelo.

- De hecho, solo yo hice mi parte. - reclamo recordando eso. Parece intentar recordar y pienso que refutará y dirá que no pero termina por responder otra cosa.

- No me has solicitado ayuda.

- Estoy esperando el momento indicado. - aseguro más fluida.

- Por lo pronto creo que deberías salvar a tus amigas. - el rostro de Daniele invade mi mente y me tenso por completo.

Joder, claro que si. El dolor psicológico de una pérdida es lo que intentaron hacer. Miles intentó secuestrar a Daniele pero alguien llegó antes por lo que descuartizaron a la prostituta de Joaquín y escondieron el ADN. Y esa persona que salvó a Dani es la misma que me envió el mensaje diciendo que volteara al bosque y la carta, las cartas.

Fue Ángel.

- Deja de joderlas a ellas, búscate una vida. - termino por responder.

Escucho su risa del otro lado de la línea.

- Extrañaba tu sentido del humor conejita, pero debo corregirte, no soy yo quien las va a joder. - la seguridad en su tono me hace dubtatear.

- ¿Entonces quién?.

- Tenemos tiempo para ver eso, primero haces algo por mi y ya después yo te ayudo. - vuelve a su estúpido juego que nada más me ha hecho perder el tiempo.

Geheimnis #1 COMPLETADonde viven las historias. Descúbrelo ahora