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Con el paso de los días Hyunjin empezó a notar el interés tan intenso que tenía Changbin con Felix, la veces que no podía estar con el menor por las estúpidas tareas y trabajos mandaba a las amigas de Yeji como espías para tener vigilado a ese enano.

Según las palabras de ellas, Changbin era demasiado atento con Felix, lo escuchaba con atención y podían jurar que los ojos de Changbin brillaban al verlo hacer cualquier cosa, si estaba comiendo, si estaba escribiendo, si hablaba, si respiraba, si existía, Changbin lo miraba como si fuera lo más hermoso del planeta.

E incluso si Hyunjin estaba ahí, Changbin siempre tenía atenciones con Felix, algunas veces almorzaban los 5 juntos-pues Lee know y Han siempre estaban con Changbin- y podía ver como ese par podía notar el cortejo del enano, pero no hacían nada por detenerlo.

Y le molestaba aún más la situación porque Changbin había ido más veces al departamento de Felix en esas 3 semanas que lo que él había ido en sus casi 6 meses de relación, y es porque, para acabarla de joder, Changbin y BangChan se llevaban de maravilla.

Soltó un suspiro molesto por lo que Felix de inmediato lo miró, estaban comiendo en ese restaurante que se había vuelto su favorito de manera inconsciente, el mayor llevaba rato perdido en sus pensamientos y ese pequeño bufido sólo logro confirmar que lo que sea que pasaba por su cabeza lo estaba molestando, así que estiró su mano y la tomó, acariciando la piel de su muñeca con su pulgar.

— ¿Esta todo bien bebé? —preguntó Felix con cautela.

Hyunjin alzó la mirada, topándose con los ojos preocupados del menor e inevitablemente se relajó. Aunque no sabía cómo responder bien esa pregunta.

—Si, sólo estaba pensando en todos los proyectos que tengo que entregar...me frustra un poco porque por culpa de eso casi no puedo pasar tiempo contigo—hizo un puchero y Felix sonrió.

—Pero si me estoy quedando media semana en tu departamento ¿Cómo es que no me ves?

—Pero siempre estamos ocupados y no podemos pasar tiempo de calidad juntos, apenas terminamos comemos y nos vamos a dormir, extraño ver películas contigo en la cama, extraño salir contigo a que conozcas un poco más de Corea, extraño que me lo hagas hasta que te cases y extraño hacértelo mientras te dejo marcas, y sé que todo esto va a ir a peor cuando lleguen las evaluaciones porque en esta ocasión no serán exámenes, serán proyectos y estaremos tan ocupados que no vamos a poder hacer nada—finalizó con un pequeño bufido.

Si el maquillaje no cubriera su rostro Hyunjin podría ver lo avergonzado que estaba, pero gracias al cielo estaba bien cubierto, sus orejas estaban rojísimas porque todo lo que dijo Hyunjin le hizo estragos en su pecho que no sabía muy bien cómo manejar.

Por lo general Hyunjin siempre era sincero con sus pensamientos, pero ese ataque brutal de honestidad lo golpeó duro.

—Además—continuó—tu cumpleaños ya se acerca y no tengo ni idea si lo vamos a poder celebrar...

— ¿Y por qué piensas que no? —preguntó con duda.

—Tus padres van a llamarte ese día Lixie...

Oh cierto, lo había olvidado; seria su primer cumpleaños lejos de su familia y en la última videollamada del mes pasado habían prometido llamarlo en su cumpleaños, lo habían agarrado en el departamento de Hyunjin, en su cama siendo más precisos, pero como su familia nunca había puesto atención en el color de las sabanas así que ni lo notaron, pero por seguridad Hyunjin se mantuvo lejos del cuarto.

—Pero eso no quiere decir que no puedas estar conmigo, podemos hacer una pequeña reunión en el departamento.

— ¿Reunión?

FEELINGSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora