Los nuevos sabios legendarios junto con Hinata Hyuga han sido exiliados luego de haber salvado al mundo ninja. Kakashi los acompaña a descubrir un nuevo mundo en donde la magia existe. Una nueva misión les aguarda en ese mundo.
El primer día de clases a llegado, las alarmas mágicas han sonado en cada uno de los dormitorios de los estudiantes desde el primer año hasta el último.
Todos ellos se han puesto sus tunicas de color negro decoradas con los típicos emblemas de cada casa.
Los maestros yacen en el gran comedor tomando su desayuno, ya que deben ser los primeros en estar en sus aulas para dar buen ejemplo a sus alumnos.
Los cinco jóvenes maestros se encaminaron a la única aula que comparten entre si. Es un salón bastante grande, en dónde fácilmente los alumnos de todas las casas y otros maestros cabrian a la perfección y aún sobraría espacio.
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No habían pasado ni cinco minutos de que ellos hubieran llegado, cuando sus ocho pequeños alumnos llegaron justo detrás de ellos con grandes sonrisas en sus labios y con la ilusión brillando en sus pupilas.
La ansiedad por aprender sale por sus poros. Quieren aprender lo más posible para proteger a los que aman.
Naruto y Sasuke, notaron que el pequeño de los Malfoy se había liberado de su pequeñísima mancha de maldad. Y eso que aún no hacen nada por él.
-Bueno jovencitos tomen asiento en dónde gusten.-Les pidió Kakashi muy sonriente.
Mientras él y los otros cuatro fueron a sus respectivos escritorios. La sorpresa de los cinco maestros fue ver qué no se sentaron por casas, de echo juntaron sus pupitres formando un semicírculo y se mezclaron. Al parecer esos jovencitos serían muy diferentes a como lo espararon los adultos. Las cosas se pondrían muy interesantes.
-Muy bien niños, ustedes no nos conocen y nosotros a ustedes tampoco por lo que al ser pocos las presentaciones serán más rápidas.- Empezó Kakashi.
-¿Y que decimos, profesor Kakashi?- Pregunto Lupin, quien está sentado entre Snape y Malfoy.
-Nombres, lo que les gusta, lo que no y su sueño del futuro.- Explico.
Eso les trajo recuerdos muy gratos a todos.
-Sensei, si les dices lo mismo que nos dijiste a nosotros, voy a quemar todo su icha icha.- Advirtió Naruto.
El hombre asintió algo asustado.
-Nos mostraría como profesor.-Pidió la pequeña y tímida Narcisa.
-Bien. Soy Hatake Kakashi. Me gusta leer, odio el papeleo y las amenazas de mis antiguos alumnos. Mi sueño una ciudad donde todos los magos vivamos juntos y en armonía.-Concluyó.
-¿Los demás lo harán también?- Está vez pregunto Peter Pettegrew.
-Es lo justo.-Sakura se puso de pie y les sonrió a los niños.-Soy Sakura Haruno, esposa de Uchiha Sasuke, me gusta la magia curativa, leer y los dulces. Lo que no me gusta, las personas con malas intenciones y que hacen llorar a las demás. Mi sueño, crear un academia de medicina mágica y un hospital.-Volvió a sentarse.
