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Aria

Después de esas palabras no hubo tiempo de nada más, solo correr, disparar y seguir corriendo, reconocía a mis soldados y me apresuraba a disparar a los que no lo eran, escuchaba los disparos, el olor a gasolina y todo era lo que me hacía correr más rápido para proteger a los que debía

Una maldita emboscada, ¿por qué nadie se dio cuenta de lo sospechoso que era todo?, ¿quién es el maldito que huyó en la lancha? ¿Hay algún topo en nuestras filas?

Las preguntas invadian mi cabeza mientras escuchaba los sonidos a mi alrededor y seguía disparando

-Retirada - anuncia alguien, creo que es la voz del mayor, y se estaba tardando en decirlo, esto nos está sobrepasando, ellos son más y tienen explosivos - repito, retirada

Sigo disparando, empezando a alejarme de la selva, varias lanchas nos esperan al otro lado del río y seguimos disparando mientras nos alejamos, saco una granada de mi camuflado arrojandola a los que nos quieren seguir cuando subimos al pequeño bote, reconozco a papá en la otra lancha y vuelvo a respirar, sabiendo que está vivo,

Llegamos a un punto escondido donde no se escuchan las detonaciones y no había más de 10 lanchas con los soldados, algunos heridos, otros preocupados y no era para menos, este es un golpe fuerte, que acaba de dejarnos a la deriva

Esos malditos nos conocían y sabían que estábamos de encubiertos, toda la misión se fue al caño, -tal vez solo fuimos su maldita entretención este mes- y no hay ni media idea para proceder, ahora que nos dejaron cojos por así decirlo, ni siquiera a mí se me ocurre algo para hacer, y mientras pienso en eso llegamos al aeropuerto de la base colombiana

-¡Lo advertí maldita sea! - grita el mayor, apenas llegamos a tierra, caminamos hasta entrar en la pequeña sala de juntas y repite lo que acaba de decir, golpea una mesa, yo examinó quienes están en la reunión, los capitanes, y tenientes, el mayor y el comandante - ¡te lo dije Sullivan! - señala a mi padre - todo era demasiado sospechoso

-Te hice caso, por eso mande a la mitad de los soldados de regreso a la base - expresa mi madre, tocando sus sienes - quiero un reporte de perdidas - dice al final, y los tenientes asienten, dejándonos solo a los capitanes con el Mayor y el comandante

-¿Quienes piensas que sean? - pregunta de nuevo Rusek hacia mi padre, que solo suspira

-Yo distingui a un sujeto de casi dos metros- hablo por primera vez- no se le veía la cara pero parecía ser el cabecilla, estaba tranquilo incluso cuando empezamos a atacar, creo que ya lo sospechaba - recuerdo, que si no estoy mal, vi hasta su maldita sonrisa cuando empezamos a disparar

El sabía que estábamos allí , nos estaba esperando

-Si, pero de nada sirve si no sabemos el nombre - habla de nuevo el mayor, con cansancio, aprieta el puente de su nariz, mirándonos a todos - volvamos al comando, todo se fue a la mierda y necesitamos aunque sea una idea de quienes...

Las palabras quedan a media cuando un soldado entra agitado con un macbook en la mano, está asustado

-¡Señor, tiene que ver esto! - dice rápido entregándole el aparato a Brandon

Rusek lo recibe y empieza a conectarlo a la pantalla principal, apenas se enciende ni vista reconoce la figura que sale de inmediato, «el hombre de dos metros, que estaba sobre la cola del barco dando instrucciones»

"Buenas noches Marina especial unida- saluda, la voz ronca con acento español me cautiva de inmediato, haciéndome abrir la boca, tiene la cara cubierta con un velo que hace imposible que pueda detallarlo, lo único que se puede apreciar, era el color algo rojo de sus ojos, parecía un animal que ataca de noche, tal vez sea uno - mi nombre... bueno mi nombre no es importante, tengo un maldito dolor de cabeza por su puto ejército de mierda

EN MEDIO DEL MAR [Spin Off De La Biología Condena #0] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora