Me conoces

Nine

  —"Ironía" fue el primer libro de Tails que se publicó, en esa historia resulta ser que el villano siempre estuvo fingiendo ser uno de los buenos hasta que al final lo descubren pero no termina bien para los protagonistas —habló rápidamente sintiéndose ansiosa y temerosa.

Anyle estaba a punto de preguntar lo que eso significaba cuando una risa estruendosa y tétrica se hizo presente ocasionando un estremecimiento en las tres mujeres. El sonido provenía de detrás de ellas, tenían miedo de dar la vuelta, principalmente Cream quien pensaba que probablemente acababan de asesinar al zorro que se había quedado rezagado, pero al girar no podían creer lo que veían, Amy y Cream dieron un paso hacia atrás al ver el cañon del arma frente a ellas.

  —¿Miles? —preguntó presa del pánico la color crema, llamando por su nombre al zorro que las miraba de una forma psicótica, tenía una sonrisa forzada en su rostro y sus ojos estaban inyectados en sangre como si se los hubiera tallado con demasiada fuerza.

El contrario se llevó el dedo índice a los labios indicándole que guardara silencio sin dejar de apuntarles con la pistola.

  —No soy Miles, soy Tails —Su rostro se volvió serio como si el que lo llamaran así lo molestara —, solo Tails, me temo que Miles no soporta muy bien el estrés y he tenido que reemplazarlo. A decir verdad no creí que serían todos tan estúpidos o inocentes, cada trampa fue hecha a la perfección y aunque su ejecución dejó mucho que desear por momentos fue agradable verlo desde las sombras.

  —¿Cómo es que lo hizo? —La coyote sabía que no era el momento de hablar, pero eso podría funcionar de alguna forma como distracción, se paró frente a ambas mujeres asustadas para protegerlas e intentar acercarse al color mostaza.

  —Si revelo el secreto, el truco deja de ser divertido y preferiría hacer una demostración con vuestra preciosa garganta tal vez si le arranco las cuerdas vocales finalmente deje de hacer preguntas estúpidas —La contraria fingió que no le había afectado en absoluto, aunque en realidad no pudo evitar sentir su garganta contraerse al escucharlo.

  —¿Por qué lo hiciste? —Amy tomó valor suficiente para arrojar la pregunta.

  —Esa sí es una mejor pregunta, tu recompensa será una muerte no tan dolorosa, pero tampoco pienso responder después de todo no vale la pena jamás lo entenderían —Fijó su vista en la rosada durante un segundo, eso fue suficiente para que Anyle se lanzara contra él aprovechando el descuido.

El sonido de un disparo retumbó en las paredes cubriendo el lugar, después vino el golpe seco de ambos cuerpos al caer al suelo, en menos de un segundo el zorro empujó el cuerpo de la oficial lejos del suyo con una patada y esta soltó un quejido al impactar en el suelo frío. La bala había alcanzado a hacerle una herida algo profunda en el brazo izquierdo, eso no la detendría. Apenas Tails se puso de pie sintió una patada en su costado derecho, por inercia giró velozmente golpeando con su codo a la ojiesmeralda en el rostro haciéndola caer al suelo por la fuerza, sabía que no sería fácil, sin embargo, comenzaba a enfurecerle lo tercas que eran.

Planeaba disparar cuando un nuevo ataque desde la espalda lo hizo tambalearse lejos de la eriza rosa, observó como esta se volvía a poner de pie y tomaba un trozo de madera tirado en el suelo. Si querían una pelea a puño limpio estaba dispuesto a hacerlo, guardó el arma de vuelta en la bolsa de su chaqueta y se puso en posición de pelea esperando que se acercaran. Si bien sus golpes podían llegar a ser dolorosos estaban en completa desventaja, la eriza era una simple florista embarazada que no se acercaba para evitar que la golpeara en el vientre y la coyote a pesar de ser un elemento policíaco llevaba más de veinticuatro horas despierta junto a todo el estrés al que había estado sometida hasta ese momento.