Ray uno de los pintores mas reconocidos por su obras de artes se encontraba en su estudio, terminando un boceto para poder pintarlo y poder presentarlo ese mismo dia, pero por alguna razón el no podía terminarlo, algo..., no. Mejor alguien, le resultaba conocida en ese dibujo, pero no sabia el porque.
Aunque sin darse cuenta la mañana habia pasado como si nada. Llegando a ser mediodía.
Un golpeteo lo termino por alertar saliendo de su oficina y dirigiéndose a la puerta principal de su apartamento. Al abrirla se encontró con un pelirrojo con una bolsa de compras en su mano
— ¿Nat? — cuestiono el azabache mirando raramente a su cuñado
— Anna dijo que no estas comiendo como se debe. Por estar terminando tus trabajos a últimos momentos — Contesto con enojo en su tono de voz
— Es muy temprano para que me estés regañando ¿no crees Nat? — el azabache se rasco la cabeza suspirando al ver el pelirrojo como fruncia aun mas su ceño —Bien. Pero deja de hacer esa cara me recuerda cuando Anna intentaba regañarme — comento dirigiéndose dentro de su apartamento — Pasa y cierra la puerta.
Nat suspiro y termino por entrar al departamento del azabache el cual raramente estaba completamente ordenado.
— La terca de tu esposa ordeno todo la anterior vez que vino, ¡hasta que me toco todos mis bocetos tirándolos a la basura!, ¡por el simple echo que pensaba que eran basura! —se quejo este preparando unos platos y una olla con agua para calentar
— ¿Qué le dijiste para que lo haga? — cuestiono este dándole los fideos para después ponerlo en el agua caliente
— ¿Yo?
— Si tu…
— Nada… Que no recuerde… — Dijo con una sonrisa en su rostro y desviando su vista a otro lado
— Aja, ¿quieres que te lo recuerdes? Cuando llego a casa estaba, muy irritada por lo que le dijiste — una sonrisa tenebrosa se formo en sus labios
Ray trago en seco al oír salir eso de la boca de su cuñado, aunque parezca débil físicamente puede que sus palabras fueran duras y su rostro se tornaba tenebroso cuando se trataba de su tierna y gentil esposa.
Un suspiro salio de la boca del azabache quien solo puso la tapa a la olla y se alejo de la cocina
— Sígueme — aparto la vista del pelirrojo y se encamino a su oficina
Nat vio con rareza al pelinegro pero lo termino por seguir y al estar en el marco de la puerta, vio como el azabache estaba arrodillado en el suelo delante de un armario — ¿Qué buscas Ray? —
— Solo algo para que me puedan perdonar — conjuro siguiendo buscando
— mhg... ¿Como harás eso?—
— Tu solo espera, por cierto No toques nada de la mesa — hablo mirando de reojo al pelirrojo quien estaba apunto de tacar un papel de esa mesa
— Bien aunque... ¿Quien es? — cuestionó levantando un papel mostrando un boceto de la cara de una mujer.
El pelinegro suspiro llevándose dos hojas con el las cuales saco del armario — No lo se... —
— ¿¡Como que no lo sabes?! — este se exalto por la fina respuesta del azabache quien por inercia no le dio atención y le saco esa hoja de la mano
— Solo se que apareció en uno de mis sueño, ¿Que tienes algún problema que dibuje cosas que salieron de mi cabeza? — cuestiono este volviendo la mirada de fastidio a su compañero
— C-claro que no Ray, pero... —
— ¿Hay algun pero. Nat? — amenazo con su mirada de ahora seriedad
