Me gusta estar contigo...

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-...me mandaron una foto de Olivia besando a un chico- su voz se escuchaba entrecortada y sus ojos comenzaron llenarse de lagrimas.

-¿La rubia esa con la que salías?- asintió -Es una maldita perra, no lo puedo creer cuando la vea la voy matar y voy a cortarla en pedazos y le daré de comer sus pedazos al perro del vecino- dije haciendo muecas y gestos, las personas a mi alrededor se me quedaron mirando entre una mezcla de asustado y sorprendidos.

Kio me miro con una sonrisa en los labios, al menos le había sacado una sonrisa, tome su rostro y me levante de la mesa acercándome a él para darle una abrazo.

-Ella se lo pierde- dije dándole un beso en la frente.

-Gracias, pero creo que ya es mucho abrazo- dijo separándose de mi, tenía razón este abrazo fue el más largo que teníamos.

(~•~)

Al terminar de comer volvimos a casa con todas las bolsas y mi ropa, en el camino le compré a Kio algo que le podría subir el ánimo, era una trajeras de Pokémon o algo así, en su cuarto tiene una colección de esas y cada vez que íbamos a ver a Vinnie lo único que hablaban era de esas cartas, nunca entendí el juego.

-Kio ven, tengo algo para ti- grite desde l cocina y a los pocos segundo apareció Kio.

-¿Que?- pregunta curioso.

-Toma- le entregue el sobre -Siempre veo que te lo compras, no se como se juega, peor pensé que te podia gustar- Kio me devolvió un abrazo.

-Gracias- salió de la cocina dando pequeños saltos, me da ternura algunas veces.

Como mis padres no estaban decidí por hacer un pastel para cuando volvieron, pero los pasteles que viene en caja ya casi listo. Nomas le tengo que agregar huevo agua y aceite. Metí el pastel al horno y puse el temporizador 30 minutos.

Cuando salí de nuevo a la sala Kio estaba abriendo su pequeño regalo con una sonrisa en los labios.

-Voy a estar arriba, en 30 minutos apagas el horno-

-Ok-

Subí directo a mi cuarto y me lanzo a mi cama, para no aburrirme leí un libro que me dio Benjamin antes de venir a Los Ángeles trataba de demonios y ángeles un triángulo amoroso. Estaba en la mejor parte cuando algún se iban a besar cuando una llamad interrumpe mi lectura.

¡¿Hola?!

Enana...

Bas...¿Como has estado?

Bien, extrañe escucharte, lo siento por no llamar antes tenia mucho trabajo, mis clases y esas cosas.

No te preocupes

Si me preocupo, te has ido casi una semana y solo hemos hablamos 3 veces.

No te quise llamar por que que trabajas no te quise estorbar

Tu nunca estorbas.

En el fondo de llamada pude escuchar los ladridos conocido, Hades.

Me puedes enseñar a Hades

Si dame unos segundo

Pensaría la cámara y después de casi una semana al fin le pude ver la cara a mi novio.

Hola

Hola, te ves muy linda

Digo lo mismo de ti

Déjame Quererte [Jaden Hossler]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora