Unión

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En el cuarto de descanso se escuchaba varios susurros y el fuerte olor a alcohol me hicieron despertar.

Creo que morí y estoy en el cielo porque tenía un ángel frente a mí.

— Hagan silencio, ya despertó — Una voz lejana hablaba.

— ¿Qué pasó? — Una pregunta algo típica de las telenovelas, pero apenas tenía voz para decir eso.

— Park, mucho gusto soy Seokjin y para no alargar esto tenemos que hablar — Suspiró.

Listo recién lo conocí y ya me iba a echar.
 
— Primero que nada, estaba satisfecho con su trabajo, no había tenido ninguna queja hasta hoy — Hablaba mientras caminaba de un lado a otro.

Definitivamente ese rostro debería ser un patrimonio cultural.

— Pensé que era un accidente real no una cortadita — 

— Lo siento —

— Sabe que lo puedo demandar, ¿verdad? —

Una demanda... ¿Qué?, no podía pensar en eso, me hundiría y además no pensé en las consecuencias.

Ya estaba totalmente listo para pedirle perdón, llorar y rogar, pero él se río y creo que fue por mi cara de espanto.

— Solo se la pasaré porque me dio risa, si no ya estuvieras fuera de este prestigioso lugar—

— Muchas gracias, señor, no lo volveré a hacer en mi vida — Dije rápidamente, ya había dado mucha pena.

— Pero no evitará el regaño de Min y que desde ahora lo vigilaré más de cerca —

Definitivamente no se salvó del regaño de Yoongi tampoco de sus gritos, mucho menos esperaba la noticia de que ahora Seokjin lo observaría en todo momento.

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No fue nada grave tampoco negativo, no era un jefe agresivo era bastante agradable chistoso y amable.

Entre bromas y bromas todo era alegre, Seokjin cocinaba mientras que Jimin estaba a su lado permitía que ayudará y le generaba conocimientos, algo perfecto.

Las bromas no quedaron solo en el trabajo, lentamente se pasaron para cuando todos salían y el restaurante quedaba solo como también las veces que se salía temprano y charlaban afuera entre sonrisas y coqueteos "disimulados".

Lentamente se escaló a los fines de semana y después no se podían dejar de ver, para entender que estaban mutuamente flechados.

El amor gracias a las papas °𝑱𝒊𝒏𝒎𝒊𝒏°Donde viven las historias. Descúbrelo ahora