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Jimin.

Jungkook y Jimin se encontraban recostados en el sillón de la casa del castaño.

Le había confesado que eran asquerosamente ricos y nunca se tendrían que preocupar por el dinero durante toda su vida. Pero el rizado había replicado que él no se quedaría sentado haciendo nada, él seguiría estudiando y conseguiría un trabajo, animó a Jungkook a hacer lo mismo pero éste era un flojo sin remedio.

La basura de las frituras que comían estaba regada por el piso de la sala y ninguno de los dos chicos planeaban levantarla.

El ojiverde comía bolsas de papas como si no hubiera un mañana.

-¿No estás lleno ya?-Preguntó Jungkook tomando un puñado de frituras de la bolsa.

-No.

-¿Estás seguro?

-¿Estás diciéndome gordo?

-No.

-¿Estás seguro?-Pregunto Jimin burlón.

-¿Estás diciéndome mentiroso?- Ambos chicos rieron.

-Si, eres un mentiroso.- Jimin estuvo a punto de besar a Jungkook, pero unas arcadas horribles le hicieron retorcerse y correr al baño.

Jungkook fue tras él de inmediato y lo encontró de rodillas frente al retrete, se arrodilló a su lado y tomó unos cuantos rizos rebeldes.

-No sabia que mis besos te causarán asco, cielo.-Dijo el castaño mientras acariciaba la espalda de su prometido.

-Cierra.-Arcada- la.-vomito.- boca.- suspiro.

-¿Por qué? Podrías hacer muchas cosas con mi boca abierta.- El ojiazul le dió una mirada significativa pero el rizado solo le frunció el ceño.

-Idiota.-Dijo malhumorado, se limpió la boca y salió del baño, Jungkook lo siguió.

-¿Vas a ir a tu consulta, cielo?

-Claro que si.-El rizado se encontraba en su habitación vistiéndose.

Treinta minutos más tarde ambos chicos se encontraban en el consultorio, Jimin recostado con su camisa enrrollada dejando ver -su apenas- abultado vientre y Jungkook a su lado sosteniendo su mano.

El doctor esparció el gel por el estomago de Jimin y paso el aparato por encima.

-Ahí está su bebé.

Jimin y Jungkook miraron la pantalla, un punto no tan pequeño alumbró la pantalla, sus ojos se llenaron de lágrimas.

-Es nuestro bebé, Jungkook.- Jimin miró a Jungkook, sus ojos verdes brillaban con una intensidad de mil soles.

-Lo es.-El castaño besó a su prometido, su beso demostraba el amor que le tenia y el que le daría a la pequeña criatura que nacía dentro de Jimin.

-Les daré la fotografía del recuerdo.-Dijo el doctor entregándoles la pequeña impresión.

Jungkook pidió un marcador y escribió: Mini-Cielo, 2014.

18

Jimin

El rizado se encontraba sentado en el auditorio donde el señor Collins impartía su clase, su abultado vientre de cuatro meses ya era visible bajo su camiseta.

—En el hemisferio izquierdo del cerebro se encuentra...

—Jimin.- Elliot, un chico de su clase, susurró su nombre, el rizado se giró.

Sky (Kookmin)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora