Capítulo siete

64 8 0
                                    

Confusión con una mezcla de intriga

De golpe, Reino Unido se despierta, con una expresión muy sorpresiva en su rostro.

Al rato, se rascó su frente intentando comprender su sueño.

¿Por qué soñó con ella? Hace mucho no hablaban, su relación hoy en día no era una muy cercana. Pero tampoco se odiaban, era un punto intermedio.

Era extraño, no lo comprendía. Apenas había empezado a seguirla para comer... milanesas, y había despertado, sin siquiera poder reaccionar.

Siguió encorvado mirando a un punto fijo por un rato, hasta darse cuenta de algo.

—Oh! True, I better write down the dream so I don't forget it. Maybe someone can tell me what it means... (¡Oh! Cierto, mejor anoto el sueño para no olvidarlo. Tal vez alguien pueda decirme que significa...). —En seguida agarró de su mesita de luz una libreta de hojas rayadas y de tapa dura que siempre llevaba a mano, para anotar cosas como sus sueños, esperanzas, poemas, cartas o cosas que se le ocurrían en el momento.

Quiso que todo estuviera lo más prolijo y entendible posible, cosa que era bastante difícil, ya que recién eran las seis de la mañana. Horario que para muchos, es muy temprano. Pero él ya estaba acostumbrado a levantarse a esa hora para ir a la escuela.

Lo releyó por quinta vez, terminando conforme con lo que había escrito. Poco a poco se iba olvidando del sueño y había que aprovechar a escribir todo con lujo de detalles.

Dejo el cuaderno en su lugar, para luego levantarse con cansancio de su cama. Caminó hasta el baño aún con su pijama negro puesto. Cuando llegó se miró al espejo: estaba un poco despeinado y con cara de dormido. Abrió la canilla del agua fría y se lavó la cara, y de paso cepilló sus dientes por un rato largo. Después de eso, se fue desnudando para bañarse, como todos los días a la mañana para ir a la escuela.

[🌱]

Ya cambiado con el uniforme del colegio, el joven bajó las escaleras encontrándose con su padre haciendo el desayuno.

—Hi dad, good morning. Oh, and you too mum. (Hola papá, buenos días. Oh, y a ti también mamá). —Saludó primero al Escocés, quién le respondió con un asentamiento. Y después a Inglaterra, al darse cuenta de que estaba sentada en la mesa leyendo un libro, mientras tomaba un té.

—Hi son. (Hola hijo). —Le respondió sumergida en su lectura.

Y sin seguir un tema de conversación, se sentó en una silla, agarrando de un plato un pastel de chocolate que había sobrado de ayer. Al rato Escocia le dejo una taza de té enfrente suyo.

Los tres desayunaron tranquilos. Sin sentir la necesidad de entablar una charla.

Tiempo después de terminar y lavar los platos, cada uno se fue por su lado.  

[🌱]

El joven estaba caminando hasta su colegio, notando que el clima seguía húmedo, con amenaza de lluvia. Aunque eso fuera obvio, no se preocupó en lo absoluto y siguió caminando tranquilo, hasta llegar a la institución.

[🌱]

Ahora él estaba sentado en un pupitre, al lado de una ventana, escuchando atentamente lo que decía su profesora de historia. Aunque ya se supiera todo de memoria.

Por un momento, volteó su cabeza a aquella ventana, mirando atentamente como caían las gotas de lluvia. Relajó su ceño con una sonrisa de lado dibujada en sus labios, contemplando el ambiente del día. 

Ya era costumbre que el clima en Londres sea así, no había de otra que conformarse y aprender a vivir con eso. Aunque, no podía seguir así durante toda la jornada escolar, contemplando la común lluvia del lugar. De inmediato volvió su mirada al pizarrón, tomando apuntes de lo recientemente escrito allí.

[🌱]

Pasaron algunas horas desde el fin de la jornada escolar. Nuestro querido Británico estaba volviendo a su hogar caminando después de que la lluvia cesara un rato. 

Caminaba a paso descuidado con la cabeza gacha, observando con suma atención sus pies, con una campera azul, la capucha puesta y sus manos en los bolsillos. Mientras tanto él se estaba cuestionando algunas cosas. 

—Sometimes I feel like this is all so boring and... (A veces siento que todo esto es tan aburrido y...). —Pensaba en voz alta, tratando de darle algún sentido a lo que estuvo cuestionándose últimamente. ¿Qué? ¿Cuándo? ¿Dónde? ¿Cómo? Y sin olvidarnos de la palabra interrogativa que más se repetía: ¿Por qué?

Se nota que te faltaba algo interesante en la vida.

Estuvo con su cabeza en las nubes por un rato, hasta ser despertado de su mundo de pensamientos por una voz conocida.

—Hallo! Bis bald, UK! Wie geht es dir? (¡Hey! ¡Tanto tiempo, Reino Unido! ¿Cómo has estado?). —Preguntó amable y educadamente aquel Alemán que tanto conocía. 

[🌱]

❁ 802 palabras
❁ Capítulo siete
❁ 24/05/2021 
❁ @LuzAra14

Mi pequeña historia UKArg | CHDonde viven las historias. Descúbrelo ahora