Capitulo XIII

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La vida es rara, al igual que las personas. En muchas ocasiones es difícil de entendernos a nosotros mismos, nos confundimos y perdemos el rumbo de nuestro camino, otras veces llegan personas que nos hacen perder esa estabilidad, llegan y ponen tu mundo de cabeza, te hacen darte cuenta que la vida es mas que solo una rutina y que tienes que aprovechar cada jodido detalle de está por que en cualquier momento todo puede cambiar, este cambio puede ser para bien o lo puede ser para mal... En mi caso este cambio fue una destrucción total en mi vida, permanecerá en mi memoria como aquellos recuerdos y tristezas que nos gustaría eliminar por completo de nuestra mente, pero que por más que lo intentemos siempre llegamos al mismo termino de aquel comienzo, y es que es imposible olvidar.

Una ves leí en algún libro que los recuerdos son el mayor de los tesoros, son todo aquello que nuestra mente guarda con un significado, ya sea bueno o malo, estos recuerdos pueden ser especiales o pueden ser todo aquello que mas nos atormenta, aquellos que nos sumergen en  oscuridad segando por completo la luz que ilumina nuestros días volviéndolos grises y sin color alguno.

Si tan solo alguien me hubiese advertido que al terminar éste día me toparía con la peor de las noticias, jamás hubiese aceptado salir con Matthew, pero el hubiera ya no existe. Ella ya no existe.

Viernes 14 De Agosto Del 2020
                                             1:37 Pm.
Támara

La mirada penetrante de matthew no tenía pisca de disimulo, su ojos estaba fijos en cualquier movimiento que realizaba, era como si estuviese analizándome, parecia algún loco con problemas mentales. Nuevamente dibujo una sonrisa juguetóna en sus labios y yo quise desfallecer con tremendo encanto, "Consetrate támara, joder. ¿Como es posible que ningún chico haya logrado en meses lo que este tarado esta logrando en horas? Me doy pena" me obligo a mi mima a ignorar su jodida sonrisa y poner atención al panorama.

—Y bieeeen, ¿En donde se supone que estamos genio?— Matthew dio una ojeada al lugar como yo lo había hecho hace apenas unos segundos. Su cara cambio enseguida, la sonrisa que iluminaba su rostro fue remplazada por una pequeña mueca que quiso disimular sin éxito alguno por que la alcanze a notar,  recargo su cuerpo en el respaldo del aciento del coche eh hizo un chasquido con la lengua "un muy sexy sonido si me lo preguntan" ok, yo nunca pensé eso. Verlo de esa manera tan seria me recuerda a el chico que diariamente suele ser, el chico que parecía serio ante todas las personas pero a su ves también parecía mesquino y arrogante, de hecho se expresaba de esa manera. "No se puede olvidar el hecho de que sus amigos y varias beses él me hayan menospreciado" Entonces me planteó esto, ¿por que de la nada quiere estar con la rara del colegio? Eso es algo que enserio me causa curiosidad, él es un chico demasiado guapo y pues yo la verdad no tengo nada que le pueda agradar a la clase de hombres como él, sí, me refiero a esos hombres con belleza infinita, y es qué si hace unos días me hubiesen dicho que estaría en el mismo coche con el chico que es considerado el más guapo de el pueblo "y es que en definitiva lo es" la verdad me hubiese reído a carcajadas como loca epiléptica. Pero heme aquí, es que ni yo misma me lo creó, aún me resulta imposible el hecho de que Matt este a solas conmigo.

—Venía aquí con mi padre y mi hermana,—aclaró — claro cuando mi padre aún tenía tiempo para sus hijos. Eso fue hace años, éramos unos críos, ya te imaginaras. —La tristeza en su vos era palpable, y ya que por lo que menciono hace unos segundos no se tiene que ser muy inteligente para entender que su padre ya no pasa tiempo con ellos, yo nunca eh sido muy apegada a mi padre, le quiero pero jamas eh tenido esa conexión que tal ves muchos hijos tienen con sus padres, y menos ahora con todo lo que esta pasando con él y mi madre. El hecho de que este abriéndo tantas heridas que creía cerradas duele y duele mucho. —¿Como es tu padre Támara?—Sin palabras, no se que se supone que tenga que responder a eso, creo que esa era la pregunta que no quería que hiciese. El debió notar la tensión de mi cuerpo por que enseguida se aclaro su garganta y sin previo aviso tomo la palma de mi mano dando un pequeño apretón.

Entonces lo entendí todo, Matthew tenía curiosidad sobre todos los rumores que involucran a mi familia y es que para nadie es un secreto el daño que sufrimos hace unos años, yo me esmere demasiado en ocultar todo aquello y aunque nunca me preguntaron nada sobre aquel crudo acontecimiento eh de decir que todo el pueblo esta enterado de lo que sucedio en lo profundo de aquel bosque, tal ves no saben la verdad a ciencia cierta pero tienen un pequeño adelanto de la historia, lo único que saben con certeza es que un primero de junio, siente familias perdieron a sus hijos y esas mismas siente familias jamás los recuperaron ni vivos ni muertos, fue como si el bosque los hubiese desaparecido sin dejar rastro alguno. Tal ves suene aterrador pero es que eso es lo que realmente paso, el director de la policía formo grupos de búsqueda, en algunos mi padre estuvo incluido mas sin embargo jamás encontraron una pista que los guiara a ellos.
Con el paso de los meses el jefe de policía decidió abandonar el caso, alegando que los adolescente habían huido de casa ya sea por rebeldía o simplemente por diversión y que tal ves con el paso del tiempo regresarían, cuando se les terminase el dinero quizá. Ese discurso tranquilizo a los padres por un par de semanas pero al ver que sus hijos jamás regresaron la preocupación regreso. Las familias quisieron abrir una nueva búsqueda pero aun así nunca dieron con ninguno de ellos hasta el día de hoy.

—Sabes que no tiene que contarme nada si no quieres, ¿verdad?— hablo Matt nuevamente  sacandome de mis recuerdos, no se cuantos minutos me quede en silencio pero si se que fueron los suficientes para que Matthew se inquietará, tenía el ceño fruncido y mantenía mi mano en su  rezago, asentí con la cabeza intentando aparentar que todo esta bien y volví mi vista al frente.

—Me dijiste que venías aquí con tu padre, pero aquí no hay nada, o almenos yo no veo nada.—Le dije con una sonrisa para aligerar el ambiente y eliminar la inquietud. El me sonrió igual y me dio un asentimiento de cabeza.

—¿Ves ese camino de terracería que esta justo aya?—señaló el angosto camino que apenas y se vislumbraba.

—Ajaam — dije hechando una ojeada, los árboles impedían que se viera a simple vista. De hecho antes de que me lo dijera yo no lo había notado.

—Bueno, pues por ese camino llegamos a un pequeño lago que conecta con el río, el agua siempre esta limpia y es un buen lugar para distraerse o pasar tiempo con una linda chica.— al decir esto último me dedico una sonrisa socarrona y encendió el auto tranquilamente como si no hubiese dicho aquello que logro acelerar mi corazón y sonrojo visiblemente mis mejillas.

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⏰ Última actualización: Oct 23, 2021 ⏰

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