Lust

Capitulo 33

Introdujo la llave y la rodo a la derecha. El pestillo sonó abriéndose. La calle estaba oscura y vacía. No era tarde, de eso estaba segura. Abrió la puerta y encendió la luz con el interruptor que está al lado de la puerta principal entro y se dio la vuelta. Le mostro una sonrisa avergonzada. Tomo un mechón de su cabello y lo poso detrás de la oreja mientras esperaba que el digiera algo.

-¿segura que estas bien? - murmuro después de una gran espera -

-sí, no te preocupes solo fueron nauseas por el almuerzo que comí. De seguro estaba mal.

-¿no quieres que me quede un rato? Te puedo preparar un mate si quieres o... - ________ rápidamente lo interrumpió-

Sonrió con dulzura, conmovida por su preocupación - No es necesario. Sera mejor que me duerma. Mañana hay que trabajar - murmuro haciendo que Paul sonría-

-Está bien - susurro despacio mientras delicadamente buscaba la mano de ella. La tomo con la suya y comenzó a acariciarle los nudillos- creo que ya me tengo que ir.

-¿ah tu casa?

-No. Tengo que volver al comité. Seguro esta por acabar pero de todos modos tengo que ir.

-Bueno. Nos vemos mañana y perdón por lo ocurrido, en verdad lamento haberte preocupado y... - ahora el no la dejo terminar-

-No digas eso

Paul deslizo su dedo por su mejilla. Dándole un pequeña caricia. Sonrió al ver como ella se ruborizaba un poco. No hizo nada y tampoco dijo nada más. Solo siguió con el bello recorrido en su mejilla y se quedo cómodo en el silencio que había entre ellos. Después de unos minutos más, suspiro dispuesto a irse. ________ lo detuvo cuando sujeto con más fuerza la mano que tenían sujetadas y elevo un poco más la cabeza viéndolo a los ojos. Y le suplico.

-Bésame

Paul abrió grande los ojos. Trato de disimular su asombro y alegría pero no lo consiguió. Dudo un poco. Lo quería hacer, más que nada pero había sigo tan inesperado que no parecía real. No reacciono de inmediato.

-Bésame, por favor - rogo ella -

No necesito más. La mano que estaba acariciando su mejilla se metió por su cuello y la atrajo a sus labios con pasión. Y la sujeto por la cintura con la otra mano. Había deseado sus labios desde el día en que ella le había sonreído. Lento pero dulce. Cada movimiento era una chispa que se encendía. Increíble era poco para lo que en verdad fue el beso. Fue infinito. Sus labios se movían perfectamente. Los de el eran tan suaves y carnosos que era difícil mantenerse en pie. Por último la principal tomo su lugar. Una caricia de lenguas comenzó y termino a los pocos segundos. Eso fue lo que hizo que el beso finalizara. Algo glorioso para el final. Para que los dos recuerden.

Se separaron unos milímetros. Aun podían sentir el aliento de cada uno chocar con sus bocas. Sus frentes se unieron. Paul relamió sus labios recordando el perfecto beso. Deslizo sus manos desde los hombros hasta abajo. Acariciándola. Al finalizar sujeto sus manos y aun sin despegar sus frentes el cerro los ojos y susurro.

-Tus labios me saben igual, que los labios que beso en mis sueños.

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Dejo salir un bufido y deslizo su mano lentamente por la descotada espalda. Escucho como ella gimió lentamente por la suave caricia. Dejo de hacerlo ante aquello. No pensaba acostarse con ella, no le encontraba ninguna atracción. No quería darle esperanzas, si la llegaba a excitar completamente seria una carga con la que tendría que lidiar. A parte no llevaba ningún condón. Desde lo ocurrido con ________, no se confía. Ya se había acostado con una chica ayer en la noche y lo hizo con protección. La peor cosa en el mundo. Odia aquella cosa tan molestosa.'