Harry Potter: Heredero de Merlín

Capítulo 4

Capítulo 4 ||

1 de septiembre de 1991

El andén 9 y ¾ resonaba con los ruidos entusiastas de amigos reuniéndose, padres despidiéndose y diversos animales de compañía expresando su disconformidad haciendo aún más ruido, que se sumaba al ya de por sí gran barullo que había.

Una pequeña parte de la población femenina estaba centrada en un chico apoyado en un lateral de la barrera que conectaba el andén con la estación de King 's Cross.

Dicho chico, estaba vestido con unos vaqueros ajustados negros, una camisa verde y una americana sobre esta. En sus pies llevaba unas zapatillas de un blanco inmaculado. La camisa le hacía juego con sus ojos, de un verde esmeralda, que estaban recorriendo la estación en busca de una persona en específico.

Mientras escaneaba la estación, en ningún momento reparó en la atención que estaba reuniendo en el sector femenino. Cuando finalmente encontró a la persona que estaba buscando, se dirigió hacia ella.

"¡Daph!"

La rubia de ojos azules a la que Hadrian estaba buscando, se dio la vuelta justo a tiempo para ver a Hadrian y abrir los brazos.

"Dios, te he echado de menos." Le susurro Hadrian a Daphne Greengrass en el oído mientras la abrazaba.

Las féminas que estaban mirando, empezaron a mirar a Daphne con celos y odio en sus ojos.

Mientras Daphne se sonrojaba como un tomate por lo dicho por su amor platónico, la madre de Daphne sonrió por la reacción de su hija, ya que sabía que su hija tenía un enamoramiento por el chico que habían conocido hace años.

"Ejem."

Mientras Hadrian se separaba de Daphne, vio a la madre de Daphne, Cassandra Greengrass, y a Astoria, su hermana pequeña, sonriendoles.

Dirigió su típica sonrisa torcida a la mujer que le había criado junto a abuelo.

"Hola, tía Cassie." Dijo Hadrian todavía sonriendo.

"No se que voy a hacer contigo." Murmuró para sí misma. "Eres incorregible, ¿lo sabías?"

"Eso no hace que me quieras menos." Dijo mientras iba a abrazarla.

"No, no lo hace."

Poco después se separaron, haciendo que Cassandra mirase bien a la persona a la que había llegado a considerar como a su propio hijo. Era bastante alto para su edad, midiendo un metro y medio, y con esos ojos verdes, el pelo negro y el físico que se notaba debajo de la ropa, Daphne iba a tener que tener cuidado para que no le robasen lo que consideraba suyo.

"¿Qué tal están Sirius y el abuelo?" Le preguntó a Hadrian.

"Los dos están bien, lamentan no haber podido venir, pero están ocupados con asuntos del ministerio. Me han dicho que te salude de su parte."

Tras unos minutos de charla entre ellos, Hadrian le dijo a Daphne.

"Daph, te dejo despedirte, ¿de acuerdo?" Hadrian de alejo unos metros con el fin de dejarles privacidad, debido a ese gesto, las mejillas de Daphne se colorearon levemente de color rojo.

"Daphne tiene novio, Daphne tiene novio." Comenzó a canturrear Astoria.

"Te juro que si no te callas te convertiré en un oso de peluche, ¿entendido?" Le dijo amenazadoramente Daphne a su hermana pequeña.

Astoria pegó un chillido infantil y se fue a esconder detrás de su madre.

"Pórtate bien, envíame cartas, y sobre todo, aprende y pásatelo bien. Dile lo mismo a Hadrian, ¿vale?"