Capítulo 13 ||
Hadrian se despertó una vez más en la enfermería viendo el techo blanco, soltando un gruñido, se levantó de la camilla y vio que no había nadie en la sala. Soltando un bufido de molestia por estar allí, miró a la derecha y vio que su ropa estaba allí, di alada cuidadosamente en una silla.
Levantándose de la camilla, se acercó a la silla, cogió su ropa y se empezó a vestir. Una vez que lo estuvo, se puso en dirección hacia la puerta, preguntándose por qué estaba todo tan silencioso. Salió de la enfermería y se dirigió hacia el salón comedor. En su camino hacia allí, no vio a nadie por el castillo, exceptuando a Peeves, el poltergeist, que estaba flotando por los pasillos haciendo cabriolas mientras manchaba las paredes del castillo con pintura color rosa.
Hadrian se acercó a las puertas del salón comedor, que estaban cerradas y de ellas provenía un ligero murmullo de voces. Hadrian abrió las puertas dobles del salón comedor con fuerza, que sonarán con fuerza al abrirse, y dentro vio las mesas de cada casa repletas de los alumnos. En la mesa central se encontraban todos los profesores y el director Dumbledore se encontraba de pie detrás del estrado en forma de águila, hablando con el colegio reunido.
Hadrian entró como si tal cosa mientras Dumbledore se detenía y le miraba, misma acción que estaba haciendo todo el colegio. Hadrian los miró sin ningún tipo de sentimiento de vergüenza o de culpa por haberlos interrumpido.
~ Continúe por favor director Dumbledore ~ dijo Hadrian sinceramente en dirección al director.
Dumbledore no le hizo caso, y le continuó mirando mientras Hadrian se dirigía a su asiento en la mesa de Slytherin. Hadrian se sintió observado debido a que el resto de los alumnos en las mesas le continuaban mirando.
~ Ya sé que soy guapo y tal, pero no hace falta que me miréis con tanta atención ~ dijo Hadrian con una sonrisita divertida mientras se sentaba entre Daphne y Tracey en la mesa de Slytherin.
Dumbledore finalmente reaccionó, y suspiró sin saber qué hacer con el chico de Slytherin que había salvado a tres de los primerizos de Gryffindor. El director se aclaró la garganta y volvió a retomar la atención de los alumnos sobre sí mismo.
~ Como iba diciendo antes de la interrupción del señor Black, ¡debo felicitaros por llegar a final de curso! El colegio finalmente se acaba y vais a poder olvidar todo lo que habéis aprendido en estos nueve meses durante los tres meses de vacaciones que se acercan.
Varios de los alumnos, los más revoltosos, se rieron por el comentario de Dumbledore mientras le decían al director que le tomaban la palabra.
~ Ahora, hay varios asuntos muy importantes que nos atañen. El primero de ellos es la copa de Quidditch, como ya sabéis, el equipo de Slytherin ha ganado la copa de Quidditch, así que démosles un fuerte aplauso.
En el salón comedor estallaron los aplausos, algunos de ellos eran forzados, pero la gran mayoría eran sinceros, ya que los de Slytherin habían jugado bien los partidos y habían ganado. Los que más aplaudían eran los integrantes de los equipos de Quidditch de otras Casas, que aunque estaban un poco celosos por haber perdido, también se alegraban porque habían dado lo mejor de ellos en los partidos.
Una vez que el estrépito en el gran comedor se calmó, el director continuó con el discurso de final de curso.
~ Segundo, está la copa de las Casas, el ganador es el que más puntos ha conseguido ganar a lo largo de todo el curso en base al trabajo duro. Sin embargo, este año ha sucedido una cosa insólita, una cosa que nunca había pasado en otros años. Tenemos un empate entre dos de las casas, Ravenclaw y Slytherin. Los dos cuatrocientos setenta y ocho puntos. Por eso, hemos decidido entre todos los profesores y yo, el director, instalar una nueva forma de ganar puntos al final del año, que será instaurada a partir de ahora todos los años. Pero para eso dejaremos hablar al profesor Flitwick, el que propuso la idea.
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Harry Potter: Heredero de Merlín
FanfictionHadrian "Harry" Potter es el mayor de dos hermanos gemelos, pero no es tan conocido como su hermano, Alexander Potter, ya que unos pocos días despues de que naciesen se hizo una profezía, en la cual Alexander era el niño profetizado