Nueva vida después de morir

La espía de mamá

Por la mente de Helena comenzaba a buscar algunos pasos que no fueran nada obsceno en absoluto, lo único que se le vino fue el único baile que se aprendió bien.

-Dale a tu cuerpo alegría Macarena —La rubia comenzaba a bailar y cantar aquella parte de la canción.— Que tu cuerpo es pa' darle alegría y cosa buena

Los mayores del salón se sorprendieron y la madre de la joven se tapó la boca horrorizada. Ver a su hija hacer esos movimientos y cantar esa música tan obscena le disgustaba, esa no era la pequeña y dulce niña que crió.

-¡Ya basta! —La joven terminó de menear sus caderas por el paso del baile y miró a los demás.— ¿Qué clase de señorita hace un baile tan... vulgar?

-¡Mei Ling! —Helena volvió a ver al señor que la llamo.— ¿¡Cómo puede mi señorita hacer ese tipo de cosas!? ¿¡Dónde fuiste para aprender vulgaridades!?

-¡Hey! Esto no es vulgar —La joven que anteriormente estaba bailando se cruzó de brazos molesta.— Hasta les he cantado, ¿Y así me agradecen?

-Por favor, no nos alteremos —Todos los invitados miraron al primer jade.— Joven maestra Mei, el baile que acaba de realizar no es apropiado para este tipo de situaciones. Aun así no deben perder las riendas de su control, señor y Madam Wang

-Mhp en las reuniones de amigos la macarena era lo más sano que había —Helena miró a todos -Me gustaría ver sus caras si vieran el más sucio que conozco- suspiro con una pequeña risa.— Ya saben que me golpee la cabeza y tengo alucinaciones de "otra vida"

A Helena algunas ocasiones se le escapaban palabras o frases que usaba en el otro mundo, ¿Quién podía culparla? Vivió 30 años en su verdadero mundo.

Cuando la miraban raro ante tales cosas que decía ella prefirió decir que sus recuerdos se modificaron, como a veces solía suceder con personas que se golpeaban la cabeza y despertaban diciendo que eran alguien más.

-Solo fueron alucinaciones querida, no le hagas caso a esos recuerdos —La madre se acerca a su hija y la abraza susurrándome al oído.— me gusta tu técnica para seguir nuestro plan...

-Madre... No se de que hablas —Se alejó de la contraria.— Será mejor que terminen de comer, tengo reglas que copiar

Y usando una excusa para huir Helena se marchó de forma rápida. Aquel ambiente se sentía más tenso después de haber hecho lucir sus pasos de baile. Ahora tenía una razón más para odiar aquella época.

Al sus padres ya estar en aquel lugar ella sabía que podían llevársela pero no quería irse, primero porque no los conoce en absoluto y en segunda porque ya se estaba acostumbrando a Profundidad de las Nubes y a sus personas.

Además aun ella no podía comprender a qué tipo de plan se refería su madre. Probablemente la razón principal de que Mei Ling fuera traída a Gusu fue por algo que la madre quería conseguir.

-¡Agh! Mi cabeza ahora solo produce escenas de telenovelas —Las manos de la rubia se posaron sobre su cabeza y revuelve su peinado.—

Después de tranquilizarse unos segundos volvió a caminar hacia su habitación, no tenía a dónde más ir y el lugar ya lo conocía al derecho y al revés. Realmente al principio era divertido estar en un lugar nuevo que no conoces pero conforme pasaban los días y aquel extraño lugar era una rutina todo se tornaba aburrido.

-Joven ama Mei —La nombrada miro hacia el costado y logró ver a una joven que lucía unos cuantos años menos que ella.— Soy Fan Fei, la señora Wang me ha puesto como una más de sus damas

-¿Más damas? —Helena decía dudosa.— ¿Pero cuántas damas se necesitan para respirar? Es más que suficiente con Suyin, aun así le agradezco que viniera aquí pero puedes retirarte