Parte 10: La encontraré

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Años.

Pasaron largos años desde que hui.

Perdí la cuenta, pero fueron largos.

De manera no irónica, viví debajo de un puente, hacia frio, y yo era solo un niño.

Pero no me importaba, era mejor que vivir con el.

Salí de el lugar en donde vivía, y salí caminando a la ciudad, no quería llegar tarde al nuevo trabajo que conseguí.

Muchos jefes me conocen en esa ciudad, durante estos años he tenido mas de 60 trabajos, pero considerando mi nula experiencia y mal temperamento, no me duraban mucho.

Esta vez tenia como trabajo contarle cuentos a niños dentro de un recinto infantil.

Me senté, espere, sabia esperar, llego el jefe y me dio las instrucciones, y llegaron los niños, les conté la historia, no fue bueno.

---Y bueno, de esa manera, todos los niños desaparecieron, y nunca se supo de ellos otra vez, fin--- Todos estaban aterrados mientras escuchaban la historia, y cuando acabe, se pusieron a llorar, en eso llego el jefe, he intento calmarlos, como ya sabia que eso me haría perder mi empleo, simplemente me aleje de ahí.

---¡Váyanse a la mierda!--- Dije mientras salía del local molesto.

---Genial, perdí otro trabajo y ya no tengo donde vivir, ahora que mierda hago?--- Desde que corrí de lo que yo llamaba hogar, no he tenido nadie que me apoye, he estado completamente solo todo este tiempo, ya soy un adulto pero debido a que nunca crecí bien, sigo teniendo mente de adolescente, la única forma de mantener mi estabilidad emocional y no suicidarme es viendo la foto con la que escape hace años, creo que no han habido muchas novedades respecto a las pizzerías de los osos, pero realmente no se nada, y no quiero saber...

---Mmmmm, quizás yo pueda... fundar un local? ¿Un restaurante? No se me da mal la cocina... no lo creo, no sale nada rentable y entraría en bancarrota... y si vuelvo a mi vieja casa?--- Ya no tengo casa y me cuesta subsistir con mis trabajos, realmente nadie me quiere contratar por no haber terminado ni siquiera la secundaria, y esto se esta volviendo mas difícil, estresante y agobiante.

---Pues... supongo que tendré que volver a esa vieja casa a buscar recursos para intentar vivir con lo que sea que haya ahí... aunque los recuerdos de Evan, Elizabeth, mamá y ese hombre me atormenten--- Si, desde que murieron siento que la única persona que puedo llamar como familiar es a mamá, es a la única que no maté u odié, pero no me tengo que poner a pensar en ese tipo de cosas ahora, por mas triste que esté.

Cancele la entrevista que tenía pendiente para ir a buscar la casa, estaba obligado a encontrarla, mi vida dependía de eso ya que a este paso, moriría de hambre, tomé la foto y salí a buscarla.

---Tengo que encontrar mi casa cueste lo que cueste--- ... ¡Llevo dos putas horas caminando!¿¡Qué tanto corrí ese día!? No he dejado de preguntar a gente si reconocen el lugar pero simplemente no encuentro la casa ¡¡Agh!! Desearía que este fuera "El Día mas Feliz" como decía Evan cuando estaba solo y me ponía a espiarlo, pero se que eso no pasa.

Pasaron tantos días que perdí la cuenta, estaba muriendo de hambre, preguntaba y preguntaba, la mayoría conocía al "creador del circo-pizzería de los niños muertos", pero mas allá de ese incidente casi era irreconocible, hasta que un señor mayor mas o menos conocía la localización aproximada de mi casa, fui a donde me dijo, y dando unas pequeñas vueltas por fin encontré ese viejo lugar, por lo antiguo que era apestaba a muertos y una parte la habían derrumbado, pero eso no me importó y entre.

---Bueno, de vuelta aquí... no se que hacer la verdad--- Empecé a acomodar las pocas cosas que me había llevado y explore un poco la casa, los cuartos casi no habían cambiado, y explore el de mi madre, se me sigue haciendo raro que durmieran separados, pero no es algo de lo que preocuparse ahora, entre, y en la mesita de noche encontré varias cartas de un año antes de mi nacimiento que detallaban a la perfección como mi madre pensaba que su próximo niño, probablemente no era de ella, esas letras me mataron, la pelea de ese dia...la provoque yo.

Cariño, no fue error tuyo, fue mío.

Mate a todos.

Mate a todos.

Soy culpable.

¡¡TODOS MURIERON POR MI CULPA!!

¡¡¡TODOS!!!

Culpe a Evan por una muerte que yo provoque y gracias a eso cause la suya, y como efecto domino cause otra por eso mismo.

Eras pequeño hermano, no te culpes.     Evan tiene razón cariño.

Acabe a mi familia.

Acabe con mi familia.

Lo odio.

Me odio.

Me derrumbe el el piso, no se senté, me derrumbe.

Como pude me senté, y llore mucho, llore porque acabe a mi familia, llore porque arruine todo, llore porque la culpa no era suya, si no mía, llore, merecía llorar, merecía morir.

Me tomo un muy largo rato recuperarme de la impactante noticia, cuando pude reaccionar, seguía sentado limpiándome las lagrimas, ellos no querrían esto, aun con el corazón destruido seguí explorando las habitaciones, al llegar a la de Evan y Elizabeth, simplemente las ignore, no me sentía con la fuerza para entrar, eventualmente llegue a la puerta de la habitación del segundo monstruo de la familia, la abrí aun sin toda mi fuerza, y al entrar note que estaba muy sucia, mas que el resto de la casa, es como si estuviera sucia desde antes que abandonaran la casa, encontré periódicos tan amarillos y arrugados que no pude leer nada, aunque mis lagrimas no ayudaban,  también encontré esos viejos planos azules, solo que estaban tan desteñidos que no los pude ver bien, en la mesita de noche, encontré un casete, tenia curiosidad de que era, con la profunda tristeza en mi pecho, me acerque, la reproduje y...

Me quede sin palabras, era la voz de mi padre diciéndome que Elizabeth no estaba muerta, que el había creado funciones fallidas, pero desde que Baby mato a mi hermana, sus ojos habían cambiado, que en sus palabras, ESTABA POSEÍDA, que era mi tarea bajar por ella.

¿Posesión? ¿Funciones fallidas? No decía mucho, pero era lo mas raro que había escuchado nunca.

Para este momento no pude aguantar, y llore como si fuera un niño pequeño tirándome en la cama, en esta vieja casa estaba la explicación de porque básicamente acabe con la familia, no podía seguir soportando escuchar sus nombres, me dolía el pecho.

Pero pensé en algo, si Elizabeth estaba ahí abajo, la podía salvar!! ¡Era momento de arreglar mis errores! ¡¡Bajaría por ella y la encontraría, la salvaría, y me disculparía!!

P   E   R   O     E   L   L   A     Y   A     N   O     E   R   A     L   A     N   I   Ñ   A     D   U   L   C   E     Q   U   E     C   O   N   O   C   Í .

La familia AftonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora