Amor Infinito

Dos corazones rotos

SAMUEL

Lo que paso con Carla me tenía muy angustiado, no quería devolverle la chaqueta, era el regalo, en cuanto se trata del asunto del engaño y esas cosas, ella misma sabe que las cosas no sucedieron así, tampoco quiero recordarlo pero no me deja otra alternativa.

Tan solo recordar ese día, la fiesta de Navidad... me hace hervir la sangre.

Quería hablar con ella de nuevo, la necesito, necesito explicarle como paso todo, necesito que sepa que nunca jugué con ella.

-No puedo creer que ella haya venido hasta acá pidiéndote de vuelta la puta chaqueta – murmura Ari

-Era el regalo.

-Podrías echarlo a la basura.

-¿Qué?

Esta vez me enojo mucho con sus putos comentarios, no aguanto que hable así.

-¿Para qué sigues guardando el regalo, Samuel? ¿Para qué lo necesitas?

-No tienes idea de nada, no conoces mi pasado con Carla, esa chaqueta significa mucho para mí.

Cuando di vuelta para mirarla, la vi desnuda... eran esos putos trucos de seducirme cuando ya no teníamos nada mas de que hablar.

-Ya te dije que no quiero hablar de ella...

Se avanza hacia mí, besándome, pero no puedo... no puedo seguir.

-¿Qué pasa?

-No puedo – dije, sin dar más explicaciones

Me levante de la cama, tomando la misma chaqueta que fue regalo de Carla y salgo de la casa.

No podía mas, había muchas preguntas, pocas respuestas, no solamente de mi parte sino también de la parte de Carla.

Gracias a Rebeka logre descubrir donde está quedando Carla, descubrí que vive en un departamento lujoso y decidí ir a verla, quería decirle que fue lo que paso, no quiero que sigue pensando que la engañe.

Toque las puertas, ella abre las puertas y sin preguntar quién es, al verme trata cerrarlos pero no le dejo hacerlo.

-¡No!

-¡Quiere que te vayas de acá ahora mismo!

Cierre las puertas, quería hablar con ella, no pienso irme antes de hacerlo.

-¡Voy a llamar a la seguridad!

Toma el móvil pero se le quito de la mano, le tome por la cintura, ella empieza golpearme sobre el pecho, era débil y frágil, aun se ve dolor en sus ojos.

-¡No te engañe!

-No quiero escucharte...

-Tienes que escucharme – le roge con ojos llenos de lagrimas

Ella también tenía ganas de llorar, le volví tomar por cintura, baje la mano sobre su mejilla, ella cierra los ojos, era un momento de tranquilidad que no duro mucho.

-No te creo nada...

-Yo estoy muerto sin ti – susurre

Veo que ella se debate entre creerme o no, pero me empuja.

-¡Sal de aquí!

-Carla, por favor...

-Vete y no vuelves aparecer por aquí...

Quise hacerle entrar en la razón, pero es imposible, ella me empuja, abre las puertas y me empuja con mucha fuerza.

-¡Carla!

Sigo tocando las puertas, caí sobre las puertas sintiendo su presencia por detrás.

-No me hagas esto, no lo hagas.

CARLA

De nuevo me hace esto, me busca, me hace recordar todo lo malo que paso y me quiere convencer que nunca me engaño.

¿Cómo creerle?

¿Cómo confiar en él?

Cuando lo empuje mi corazón fue aun mas roto, estaba sufriendo mucho, se que él seguía detrás de la puerta.

-¿Carla?

-¡Vete de aquí!

-No me voy a mover hasta que me abres y me dejas explicártelo todo.

-¿Explicarme qué? ¿Cómo te reías de mí, como si fuera un tonta?

-No, no me reía de ti, no fue así...

-¿Cómo pudiste destruirme de esa manera? ¿Acaso no fue lo suficiente cuando te quisiste pasar por muerto? ¿No fue suficiente? – grite

-Me duele el puto corazón, tienes que creerme.

-¿Te duele?

-Si, me duele.

-Pues, ojala te mueras- dije entre lagrimas

Fue un momento de silencio, pensé que se había ido, pero de pronto hablo de nuevo.

-Me voy a morir sin ti, te juro que eso pasara.

-Estabas con ella, te atreviste mandarme la foto y reírte de mí.

-¿Qué foto?

-La mandaste por el Instagram y me rompiste corazón, Samuel.

-¿De qué foto hablas, Carla?

-Lo sabes... no mientes, Samuel.

La foto que me mando de su perfil fue la foto con esa, ella estaba acostada en la cama junto a él, aunque él estaba dormido.

¿Por qué tengo que seguir recordándome?

-¡Déjame entrar!

Las lágrimas siguen cayendo sobre mi rostro, puse mano sobre la boca, no quise que sepa que esto me duele tanto que tengo que llorar con todas las fuerzas.

-¡Déjame entrar, Carla!

-Vete, vete de mi vida...

-Por favor, si no me escuchas ahora no se qué hare con mi vida, si tengo que tragar el puto orgullo para que tú me escuchas lo hare, lo estoy haciendo...

-Vete – susurre

-Abre las puertas – el también susurra

Después de par de segundos lo oí, estaba tomando algo o haciendo quien sabe que, cuando abrí las puertas para encontrarme con él, me encuentro con la chaqueta en frente de las puertas, al fin decidió devolverla.

Tome en las manos, cierre las puertas y empiece llorar, prometiendo a mi misma que será la última vez que lloro por él, puse la chaqueta sobre el corazón, era roto, más roto que nunca.

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Lo siento mucho, se que este capítulo fue demasiado fuerte pero fue necesario 😔 ya se descubre poco a poco como sucedieron las cosas, ya que Samu no tiene culpa de nada, algo que Carla por ahora no entiende y se irá descubriendo poco a poco que fue lo que pasó ❤️ pero Carla será un poco vengativa y esas cosas así que el tendrá que luchar por ella 😊❤️😘