Amor a profundidades [katsudeku]

• Capitulo 4. ¿Gustar? •

Advertencia
Este capitulo contiene  leve shota

Habían salido del consultorio un poco cabizbajos, el pecoso solo se preguntaba ¿por qué era diferente?, había visto la reacción de su madre y no le gustaba verla triste, ¿el doctor esta mal? ¿Era malo ser un tritón?.

no quería imaginarse que pasaría con kacchan, ¿Lo alejaría por ser alguien diferente?, Nadaba perdido en sus pensamientos siendo levemente observado por su madre.

Inko miraba a su pequeño y comenzaba a pensar en lo sucedido, ¿Como pudo ser tan mala madre y gritar así frente a su hijo?, podría haber sido un mal momento pero aceptó su error, su amor por él pequeño no cambiaría por nada, Después de todo era su bebe.

— mi amor hablemos ¿si? — dijo la sirena mirando con duda al más chico.

—Está bien —  respondió el tritón, deteniendo su nado a unos cuantos centímetros de su mamá.

La sirena peli-verde suspiró un poco, anteriormente su pequeño saltaría en sus brazos mientras se reía, de verdad lo había arruinado.

— izuku — llamo Inko con sus ojos llenos de lágrimas — por favor perdóname cariño, no era mi intención reaccionar de esa manera, tú eres mi hijo, mi hermoso tritóncito .

— Mamá — sollozó el menor mientras nadaba hacia su madre — no te preocupes, no pasa nada, te perdono, eres la mejor  — ambos peli -verdes se abrazaron, era algo que ambos necesitaban con urgencia, el pecoso soltó varias lágrimas estando en los brazos de su madre, de verdad que no quería que la sirena estuviese enojado con el.

— Gracias  — se separó gentilmente de su descendencia y sonrió  — pero ya no llores, no me gusta verte así, mejor muéstrame una  sonrisa que solo tú sabes hacer — midoriya al escuchar las palabras de la sirena soltó una gran sonrisa mientras asentía,sus ojitos brillaron como dos estrellas, estaba feliz.

Madre e hijo se fueron sonriendo mientras se tomaban las manos, nadando hacia su hogar.

pero izuku aún sentía una tristeza al no saber qué le deparaba el destino con su kacchan, no quería que lo odiara y mucho menos que lo viera como un chico raro, por el momento solo pensó en no verlo por un tiempo y así aclararía como decirle a su amigo de la infancia, toda la verdad.

Pero el destino no es como pensamos