Amor a profundidades [katsudeku]

(( Capitulo 22)) Nana...

Después de varios contratiempos ocasionados por denki, y Kirishima que jamás lo dejaba solo, por fin había llegado el tan esperado día, ¡la gran boda de Yagi y inko! , todos emocionados nadaban de un lado a otro, decorando el lugar donde seria la celebración del nuevo matrimonio.

— ¡No puede creer que tan rápido pasaron dos semanas!— hablaba una linda sirenita castaña, con su pelo recogido en un chongo que hacia relucir sus tiernos cachetes. — inko-san se miraba preciosa en la mañana que la visite — sonrió.

— además de lo hermosa, su pancita de embarazo creció más durante estas semanas — comentó tsuyu llevando sus manos a sus mejillas.

Después de todos los encuentros de las nuevas parejas, inko había comenzado a comer en exceso, con demasiados mareos y antojos a toda hora, Yagi preocupado decidió llevarla urgentemente al médico marino, donde le dieron la mejor noticia de su vida... Inko toshinori tenia 3 meses de embarazo.

Todos estaban realmente felices por la noticia, incluso izuku llevaba días pensando en nombres para su futuro hermano o hermana.

—¿uraraka-san?— llamó lida entrando al gran salón acuático.

La oji-cafe al reconocer la voz, de inmediato dejó en lo que trabajaba y fue a los brazos de su novio.

— ¡lida-kun! — sonrió al ver la atenta mirada del mayor en ella.

Al llegar a los fornidos brazos de tenya este se inclinó para depositar un cálido beso en los labios rosados de la chica. Logrando un sonrojo en ambos por aquella acción.

— y-y b-bueno ¿Dónde se encuentra  midoriya-kun y bakugou-kun? — pregunto nervioso desviando su mirada a otro lado.

— o-oh b-bueno izuku-kun esta ayudando a inko-san a prepararse y bakugou-kun los acompaña — sonrió nerviosa.

— oh, me alegro que ayuden a inko-san, es genial tener apoyo en un día tan especial como este... ¡Kaminari! — grito llamando la atención del Rubio eléctrico. — ¡Deja esas algas! !nos dijeron que solo eran decoración! — movía sus manos de su típica forma robótica regañando en altavoz al del mechón de rayo.

—¡nunca mencionaron las pequeñas! — respondió formando un puchero.

— ¡dijo sobre todas! ¡Y es esencial seguir las reglas!.

— ¡tiburoncito! — lloro kaminari por su peli-rojo novio.

— ¿Qué paso rayito?— respondió al instante de su llamado, saliendo detrás de unas grandes piedras.

— lida-kun me esta gritando , solo por que estaba comiendo estas algas — mencionó mientras fingía que se secaba una lágrima falsa.

— vamos precioso, no lo decía enserio, no llores — sonrió levemente acariciando los cabellos amarillos de su novio. — además te traje esto — alzó su mano dejando salir brillos rojos y celestes, estos danzaban alrededor de ella hasta que  unas algas verdes y Rojas se posaron en la extremidad. — sabía que tendrías hambre — sonrió extendiendo la comida a kaminari.