Change.

Capítulo 11. ¿Me perdonas?

Llevo una semana sin saber nada de Dylan. Parece ser que se ha tomado en serio lo de que no quería volver a verlo. La verdad es que ha sido una semana bastante rara. Estaba pero a la vez no estaba, iba de un lado a otro como si fuera un fantasma como si no tuviera alma. Y por un lado me siento así, como si no tuviera alma. Siento como si me hubieran arrancado un pedacito de mi corazón. Siento que me falta algo y ese algo es él, mi Dylan.

Mis amigos dicen que ya no parezco la misma y es que ni yo misma me reconozco. Porque desde que él se fue se llevó mi felicidad.

Hoy es sábado, normalmente los sábados son mi día favorito de la semana. Normalmente saldría con las chicas a comer y luego quedaría con Dylan. Pero ahora ya no. Ahora todo es diferente.

Estoy tumbada en mi cama rodeada de pañuelos y con la manta hasta arriba. De repente oigo que golpean la puerta con ansias y después entran varias personas.

-¡Gatita, te quiero fuera de la cama en 3, 2, 1...-Logan me quita la manta y yo les miro enfurruñada.

-¿Pero se puede saber qué coño os pasa?-Digo yo de mal humor.

-Wow la gatita ha sacado sus garras. Miau.-Dice Emma moviendo las manos como si fuera un gato.

-Queremos darte cosa muy especial de una persona muy especial.-Dice Cleer. Le miro extrañada.

-¿Y bien? ¿Qué es?-Digo yo intrigada -Ah no no, primero te vas a ir a la ducha y después ya veremos.-Dice Logan señalando la puerta del baño.

-Arrgg está bien..-Me dirijo a la ducha y cierro la puerta. Me quito la ropa y me miro al espejo. Tengo unas ojeras horribles y una cara de muerto tremenda. Me meto en la ducha y me enjabono el pelo y el cuerpo. Cuando termino me enrrollo en dos toallas una para la cabeza y otra para el cuerpo.

-Bueno, ya me he duchado. ¿Me queréis decir que es eso tan especial?-Digo con los manos apoyadas en mis caderas.

-Miralo tú misma.-Logan me entrega una carta y la abro impaciente.

Querida Nina:

Sé que he sido un capullo contigo y no sabes cuanto lo siento. No sabes como me dolió verte llorar por mi culpa. Sé que habrás pensado que ya me he olvidado de ti, que ya me habré ido con otra y que soy feliz, pero no es así. Porque tú te has llevado una parte de mi corazón, te has llevado una parte de mi. Esta semana ha sido una completa mierda. Ni siquiera se como he podido sobrevivir sin ti tanto tiempo, lo único que me ha mantenido en pie ha sido tú recuerdo. No puedo permitirme el lujo de perderte ya que sin ti estoy perdido, sin ti no soy nada. Por eso te he preparado este pequeño juego. Espero que aceptes mi reto.
Siempre tuyo, Dylan.