Izel se levantó después de aquél sueño tan raro y doloroso, su pecho dolía y se quejo un poco al principio, pensó que en realidad era por las emociones que había pasado en su sueño, limpió su rostro, tratando de neutralizar su respiración de nuevo, se sentó en silencio... Pensando quizás en nada, simplemente tratando de averiguar porqué había soñado eso.
Al salir el sol optó por cambiarse e ir a fuera, a empezar a entrenar, tomo a K'i'k y corto su mano, ya no se quejo cómo antes, quizás ya se estaba acostumbrando al dolor; fue a el bosque, en donde últimamente entrenaba de más y realmente con la arma que utilizaría cuando fuera necesario.
Cuando un pequeño colibrí se acerco a él, extrañamente al extender su mano el colibrí subió a sus dedos, jamás había tenido a un colibrí tan cerca, decidió acariciarlo levemente y suave, no hubo rechazo por parte de la ave, dejando de lado su nueva arma se sentó en el mismo árbol que tenía fisuras bastantes notables, sus manos estaban raspadas y quizás en algún momento sangraria
—Eres muy pequeño, más de lo que pensaba— Hecho a reír mientras acariciaba, los mayas tenían la costumbre de pensar que cuando un colibrí te visitaba o estaba cerca de ti, era un mensaje de que tus seres queridos estaban bien; no solamente los vivos, también los que se encontraban en el mictlan, el mundo de los muertos.
—Creó que tienes que volar ahora ¿Cierto?—
La ave pareció contestar dando pequeños brincos en su mano, después abrió sus alas directo a el sol que daba rayos de luz intensos
¿Cuanto tiempo más durará así la calidez del sol?... Se pregunto.Cuando se fue el colibrí soltó un suspiro cansado, se levantó y miro sus manos morenas con bastantes raspones y hasta cierto punto sangrando, era el precio que tenía que pagar sí quería salvar todo lo que amaba. Apretó su mano en señal de que no importaba cuanto doliera, él se esforzaría.
—¡Izel! Todos estábamos preocupados, ¿Dónde estabas?— pregunto Xanastaku mientras era seguida por K'in
—¡Avisa a dónde vas! Dejas muy preocupados a todos— K'in tenía las manos cruzadas, en señal de que estaba molesto
—¡Lo siento! —
Fue lo único que pudo decir por ahora, después los llamaron para comer un poco, “Ya vamos” fue lo que respondieron, Izel asintió, pero fue antes a lavarse las manos y tratar de curarlas sin que se vieran tan dañadas—Así que entrenas a espaldas de los demás, eh— Izel al escuchar la voz dio un pequeño brincó por el susto, estaba tan concentrado en sus pensamientos que no presto atención cuando llego Zyanya
—Tengo que ser fuerte para poder protegerlos— Dijo sin rodeos Izel. Se quedaron en silencio unos segundos y la guerrera de trenzas respondió
—Ya lo eres Izel, tienes un corazón muy fuerte, para ser un buen guerrero se necesita más que fuerza en cuerpo y batalla— suspiró Zyanya, tocando su frente en señal de “No sé qué más decir” dijo
—Haces bastante por mejorar— tomo las manos del mexica y vendó sus manos—Gracias— Sonrió levemente Izel al ver la acción de la guerrera, quizás no podía decir más, aún estaba averiguando muchas cosas sobre si mismo.
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Onyx Equinox- ¡El campeón de la humanidad!
Acak"Izel, eres el campeón; Tienes que defender tus ideales, tu corazón, tus amigos... Tranquilo, es normal que te sientas abrumado, con miedo, pero todo estará bien, tienes gente que te quiere y quieres, vas a lograrlo" Escucho el pequeño de ojos esme...