ANONYMOUS;REMUS LUPIN
Kayla se encontraba leyendo la pequeña nota anónima que le dejaron el día de hoy en uno de sus libros de Runas Antiguas.
Esto llevaba pasando desde hace casi un mes.
Cada día sin falta y sin saber cómo, ella recibía una pequeña nota con un lindo mensaje de alguien anónimo, a veces estaban entre sus libros, o sobre su puesto, incluso han habido veces en que encontraba las notitas dentro de su túnica.
Ella se sentía halagada y amada a la hora de leer esas notas, pero a la vez se sentía estúpida por sonreírle a un papel.
Tus labios: Tan apetecibles desde
mi distancia y aún así se que tienen
un maravilloso sabor, diseñados por
el propio cupido que se esforzó en
hacer que se asemejen a los anillos
de Saturno.Una vez más sonrió con felicidad y sorpresa al saber que alguien pensaba cosas tan maravillosas de ella. Dejó la nota en un cofre en donde ha guardado todas estas y simplemente se acostó a dormir imaginando como sería su enamorado anónimo, como lo hacia cada noche.
[ ... ]
Esta vez extrañamente no había encontrado la nota en un lugar aleatorio, si no que ahora la habían mandado con alguien, más específicamente con James Potter.
-¡Smith! -la llamó
-Potter, ¿Qué pasa?
-Vengo a darte algo y antes que digas algo no soy yo y tampoco te diré quién es -dicho eso le entrego otra nota
Es algo decepcionante de mi
parte no hablarte y decirte en
persona todo lo que te digo en
estas notas, pero créeme que
me intimidas en el buen sentido.
Dame tiempo y reuniré el valor de
decirte todo lo que pienso de ti.Sonrió una vez más - Potter solo te preguntaré algo
- Te responderé lo que quieras menos si lo conozco, si lo conoces, de que año es, cuanto mide, si es prefecto o su nombre o apellido -dijo James como si lo hubiera practicado toda la noche
- ¿De que casa es?
- Carajo -maldijo James al ver que no previno todo - Oye eso es injusto
-No. Ahora dime o dejaré de leer estas notas de una vez por todas, y ésta querida persona que me dice cosas lindas sabrá que fue tu culpa.
James no tenía como defenderse ante eso -Oye tú y yo deberíamos ser amigos, me podrías ayudar a convencer muy bien a los profesores
-Si de eso hablaremos luego. Responde mi pregunta
Titubeó antes de responder - Solo te diré que hubiera sido un excelente Hufflepuff, pero el sombrero seleccionador prefirió elegir su casa basándose en su valía y caballerosidad.
- Entonces es un Gryffindor
-¡Yo no dije eso!
- Potter no soy tan estúpida, dudo mucho que un Ravenclaw se destaque especialmente por su valía y caballerosidad, es obvio que es un Gryffindor - ella soltó una risa de felicidad sabiendo que estaba más cerca de conocer al chico - ¡Adiós, cuatro ojos!
Y así pasaros muchos otros días en los que el nombre de aquel misterioso poeta le era desconocido a Kayla, ella cada vez se sentía más intrigada y a la vez enamorada de aquella persona, pero a la vez tenía un sentimiento de culpa. Culpa de saber que esa persona está profunda de amor por ella y que ella no haga nada para agradecerle, así que se le ocurrió algo.
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marauders; one shots
Fanfiction─ Juro solemnemente que mis intenciones no son buenas. Honey© ℜ