Siempre hay una primera vez.

Treinta y Cinco.

- Oye, tranquilo. - Dijo Fredy conduciendo mientras ponía una mano en el hombro de Axel. - Ella irá, es muy responsable.

- Lo sé. - murmuró mirando por la ventana.

Llegaron al foro penal. Camila y la madre de Eli estaban en la puerta conversando. Sus rostros estaban inexpresivos, tampoco veía a Eli por ningún lado.

- Tal vez está adentro. - Dijo Fredy apagando el motor, tratando de darle esperanzas a su amigo.

- Lo dudo, no va a venir.

- Ten un poco de pensamiento positivo. - Dijo abriendo la puerta del auto. - Confía en mi. Hoy la verás.

- Está bien. - Suspiró.

Bajaron del auto y caminaron lentamente hacia donde se encontraban Camila y La Sra. Taylor.

- Eli aún no ha llegado. - dijo Camila. - Pero, Kate, su ex secretaria me habló, dijo que Eli estaba con ella, así que posiblemente vengan en unos minutos.

Axel levantó la mirada. Ahora sus ojos brillaban de esperanza.

- ¿Ves? - Dijo Fredy sonriendo. - Te dije que ella vendría.

-Podríamos ir pasando, el juez está a punto de llegar.- dijo la Sra. Taylor.

- No. - se plantó Axel - Me quiero quedar aquí hasta que ella aparezca

- Axel, lo mejor es que entremos a la sala. - Murmuró Camila. - Si ella te ve de golpe podría escapar de nuevo, una vez en la sala ella no podrá irse tan fácil.

Camila pudo convencer a Axel de entrar a la sala.

Se sentó muy nervioso en el primer asiento y espero con sus manos entrelazadas a que llegara la hora de comenzar.... mejor dicho, a que Eli apareciera por la puerta con sus tacones resonando por el suelo.

El Juez Wilson entró a la sala, a pesar de que habían transcurrido sólo cuatro meses, su pelo estaba más canoso.

- Esperemos a que la Señorita Taylor llegue, el tráfico está espantoso.

Por treinta minutos todos esperaban en silencio, lo único que se escuchaba eran los murmuros de Camila y la Sra. Taylor y sólo la Dra. Wesley y el guardia que los custodiaba estaban en los asientos de atrás haciendo anotaciones y uno que otro comentario.

La hora pasaba y Eli no aparecía, Axel comenzaba a impacientarse.

- Tendremos que comenzar. - Dijo el juez acomodándose en su silla.

- Elizabeth aún no llega. - Dijo Camila.

- No podemos esperar más.

En ese momento las puertas de la sala se abrieron y los tacos comenzaron a sonar por el pasillo.

Axel giró su cabeza esperando encontrarla pero en cambio, una chica de pelo rojo y largo con un traje de oficina entró y se sentó en los asientos izquierdos delanteros.

- Mil disculpas la demora, el tráfico esta espantoso. Soy Kate Carson, representante legal de la Srta. Elizabeth Taylor. Pido disculpas en su nombre, por cuestiones personales no pudo venir.

Axel quedó sin respiración. No la vería, no la vería ni ahora ni nunca.

- Entra en sesión la solicitud de divorcio. - Dijo el juez golpeando su maso contra la mesa.

Kate comenzó: - Mi clienta Elizabeth A. Taylor, solicita el divorcio a Axel P. Doson, aceptando trasnferirle todos su bienes materiales y personales a cambio de total desvinculación con su persona.