Axel entró al apartamento y vio que Eli estaba en el balcón observando. Se veia tan tranquila y serena, con su pelo largo siendo balanceado por la pequeña brisa que corría a esa alturas.
Cerró la puerta despacio, sin hacer ruido, y se acercó hasta ella.
Puso sus manos delicadamente en su cintura. Eli dio un salto del susto y él la sujetó más fuerte atrayéndola hacía el.
- Tranquila. - rió él. - soy yo.
- Casi me matas. - suspiró ella.
- ¿Qué hacías aquí?
- Sólo pensaba. - dejó un suave beso en su mejilla.
- ¿En qué? - la estrujó más.
- En tí. - sonrió ella.
En parte era cierto, pensaba en él, pero pensaba en él y Carlos. Por más que trataba de ignorar las cosas que Camila dijo, volvían a su mente como un bumerang.
- Yo también he pensado en tí. - dijo besándola.
- Tenemos que hablar. - dijo Eli mirándolo fijo.
- ¿Es algo malo? - preguntó preocupado. - Dime que no es algo malo.
- No lo es. - rió y acarició su mejilla. - No te asustes.
- ¿Qué es? - sonrió.
- Recuerdas que en cuatro meses debíamos volver a la audiencia por lo del matrimonio. - Él asintió. - en una semana se cumplen esos cuatro meses.
- Wow, pasó tan rápido...
- Lo sé.
- No cambiaríamos nada. - se encogió de hombros. - a menos que no quieras ser mi esposa.
- Creo que así estamos bien. - sonrió.
- Entonces sólo le enviaremos un comunicado al Juez y le diremos que decidimos quedarnos así.
- ¿Seguro que quieres seguir casado conmigo? Digo...
Él la calló con un beso.
- Te dije que te amo, nunca se lo dije a alguien más que a mi madre.
Ella se colgó de su cuello y lo besó con pasión. Él la sujetó por la cintura y la apoyó contra en barandal del balcón. Eli pasó sus manos por la espalda de Axel mientras bajaba sus manos hasta su trasero.
- ¡Hey! - Rió él.
- Siempre quise hacerlo - sonrió ella.- tienes un trasero sensual.
- Cambiate, ponte algo lindo. - se apartó. - saldremos.
- ¿A dónde?
- Fredy y Camila quieren ir un lugar donde se baila y eso. - se encogió de hombros. - no te preocupes volveremos temprano para que puedas ir mañana al trabajo.
- Está bien. - sonrió.
Axel se dio una ducha rápida y Eli buscó algo en su armario para ponerse, un falda acampanda color negro y un top rosa pastel, tacones a juego.
Justo en el momento que comenzó a desvestirse para cambiarse, Axel apareció en la habitación solo envuelto con una toalla. Su cuerpo aún humedo, fresco y caliente al mismo tiempo. Su cabello liberando algunas gotas, todavía.
Ella dio media vuelta y lo vio allí parado, casi desnudo, dentro de su habitación, sus ojos se ajustaron perfectamente a la gota que se deslizaba por el torso de Axel hasta desaparecer por debajo de la toalla.
Le hubiera encantafo seguir viendo como esa gota transitaba su camino...
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Siempre hay una primera vez.
RomansaSinopsis. Axel Doson, 24 años, soltero, un Casanova, o como muchos de sus amigos le decían "un Gigoló". Él vive la vida loca hasta el extremo y cada vez que puede pasar por la cama de alguna chica lo aprovecha. Sin embargo, decide ir más Lejos aún:...